La Corte Suprema mantuvo la clausura de Canteras Lonco, tras confirmar el fallo del tribunal de alzada penquista que el año pasado rechazó el recurso de protección en contra de la Municipalidad de Chiguayante. Los vecinos expresaron su satisfacción con el fallo, descartando que la Superintendencia del Medio Ambiente pueda ir en contra del pronunciamiento.

En mayo del año pasado el alcalde de Chiguayante, Antonio Rivas, decretó el cierre de la empresa de áridos propiedad Aquiles Acosta, argumentando el funcionamiento sin los respectivos permisos legales y el no pago de patente.

El decreto fue impugnado por la cantera a través de un primer recurso de protección, el que fue rechazado por la Corte de Apelaciones de Concepción, luego de que la empresa asegurara que por la comercialización de productos sin procesamiento, es decir primarios, no era necesaria la autorización municipal.

Esa resolución fue confirmada ahora por la Corte Suprema, según confirmó el abogado Felipe Urbina, representante de la junta de vecinos de Lonco.

Sin embargo, la sentencia fue dividida, con dos ministros estando por acoger la apelación de canteras Lonco, al coincidir con los abogados en cuanto a la actividad primaria de la empresa y por lo tanto la no necesidad de patente municipal para el funcionamiento.

El abogado de los vecinos espera que un segundo recurso de protección aún pendiente en el máximo tribunal del país, también impugnando la clausura de la cantera, sea igualmente rechazado, descartando que lo que resuelva la Superintendencia del Medio Ambiente pueda permitir a Canteras Lonco reabrir.

El abogado Urbina afirmó que la única forma que la empresa tiene para retomar su actividad extractiva es realizando un Estudio de Impacto Ambiental, el que debe ser aprobado por la autoridad competente.