El diputado por el Partido Por la Democracia (PPD), Pepe Auth, se refirió en duros términos al Partido Comunista y la influencia que éste y sus parlamentarios tienen sobre el Gobierno.
Auth acusó al PC de contar con un trato preferencial del Ejecutivo, lo que se reflejó cuando el conglomerado propuso anular la polémica Ley de Pesca impulsada durante la administración de Sebastián Piñera.
En entrevista con diario La Tercera, el diputado indicó que “la influencia del PC en el Gobierno es mayor que el aporte real que hace en parlamentarios y votos. Le he expresado a los ministros mi impresión, mi shock por la importancia desproporcionada que se le da a algunas de sus opiniones. Es un problema que tiene el Gobierno y sería ciego desconocerlo. Por ejemplo, la anulación de la Ley de Pesca: es gravísimo que el Gobierno le deje a un partido abrir un camino que no sólo está fuera del programa, sino de la filosofía política de la coalición”.
Para Auth, lo realizado por el PC en relación a la Ley de Pesca “contamina al Gobierno y a la Nueva Mayoría con la idea de que no es el camino institucional el que se establece. Es raro que el Gobierno no haya puesto clara ni nítida la cuestión, y eso habla de su propia debilidad”
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“El gobierno tiene un diagnóstico equivocado porque actúa pensando que al ser el partido más nuevo, el único distinto a lo que era la Concertación, la fragilidad de su permanencia es mayor. ¡Está equivocado! porque el PC ha participado tres veces en un gobierno: la primera terminó prohibido y relegado y la segunda terminó muerta su dirección, con exilio y 17 años de dictadura. El PC no se puede permitir una tercera participación en el gobierno sin éxito”, sentenció.
Presidente del PC | Agencia UNO
Sobre la discusión entre el Partido Comunista y la Democracia Cristiana, el diputado aseguró que en dicho intercambio existió “una falta de límites en el trato grosera. Nunca me habría imaginado que Teillier, con su perfil, le echara bencina a la fogata. Lo trataron de sectario y cerrado y el trató de golpista y corrupto. Lo primero es una crítica fuerte pero política, y pasa a una crítica descalificadora. Eso da cuenta de cuán seguro y empoderado te sientes”.
Hay instancias en que me ha tocado participar con el Gobierno de las que salí choqueado por la relevancia que ha tenido el discurso y la posición comunista, a veces casi con efecto de veto. Porque cuando un gobierno le teme a su coalición o a una fuerza, a dos o tres, es el comienzo del deterioro definitivo.
