Son las 4 de la madrugada y aún no logras dormir. Mientras te volteas de un lado a otro de la cama, su imagen aparece en tu mente, al igual como lo ha hecho los últimos días, semanas o incluso meses. Te domina la angustia, la sensación de soledad. La idea de que tu vida nunca volverá a ser igual.

Si estos síntomas te parecen conocidos, reconócelo: tienes un serio problema tratando de olvidar a tu ex. Pero no te sientas mal. Dejar atrás una relación suele ser difícil, sobre todo cuando ha sido extensa o gatilló emociones intensas en nosotros.

Según el doctor David Braucher, psicólogo clínico de Nueva York, existen 3 factores que hacen en extremo complejo el proceso de recuperación tras romper el vínculo con una persona: la confusión, la vergüenza y la soledad.

“La confusión proviene de la idea de que mientras tu ex siga en tu mente, no lo habrás superado, por lo que tu vida emocional estará estancada. La vergüenza es porque confundimos nuestros sentimientos de amor con el deseo de reconciliarnos, de estar con alguien que ya no quiere estar con nosotros o con quien terminamos una relación”, explica en una columna de Psychology Today.

“Encima de todo está la soledad que podemos llegar a sentir, máxime si agotamos la paciencia de amigos y familiares. Ellos nos apoyaron durante la crisis y posterior rompimiento, por lo que después de un periodo de duelo razonable, esperan que sigamos adelante”, concluye Braucher.

Otro claro síntoma de continuar anclados a un ex es cuando idealizamos nuestra imagen interna de él o ella, convirtiéndolo incluso en una vara de medición de nuestras acciones.

“Un año después de su rompimiento, un joven me contaba que solía imaginar a su ex orgullosa de él cuando superaba un obstáculo importante. Su imagen interna era de apoyo, orgullo y confianza. Como si se tratara del peluche o la manta de dormir de un niño, la capacidad de amar de este joven creó esta imagen interna de su ex para ayudarle en los momentos difíciles”, narra el psicólogo.

Esta idealización es más común de lo que imaginas, y puede llevarnos a cometer graves errores cuando -en el transcurso del tiempo- olvidamos los problemas y sólo nos quedamos con los buenos momentos de una relación, algo que los psicólogos describen como “recuerdos de euforia”, quedando en nuestra mente una visión edulcorada de lo que realmente fue.

¿Cómo olvidar a mi ex?

Nicolas Raymond | Flickr (CC)

Nicolas Raymond | Flickr (CC)

Si bien no hay fórmulas mágicas (ni encantamientos) para dejar atrás a una persona, sí existen procesos que puedes manejar y que, en su conjunto, te ayudarán a sobreponerte y seguir adelante con tu vida.

1. Encontrar un modelo a seguir

La psicóloga de la Universidad de Stanford, doctora Kelly McGonigal, asegura que está comprobado científicamente que podemos obtener motivación de personas a las que admiramos. Piensa en un hombre o mujer que haya sido capaz de sobreponerse al fin de una relación compleja y seguir adelante. “Imagínate a ti mismo siguiendo sus pasos, y evócala o evócalo la próxima vez que surja la tentación de ver el perfil de tu ex en Facebook”, explica.

2. Cambiar una adicción por otra

Cuidado: no se trata de encontrar rápidamente otra pareja para llenar el vacío. La idea es fijarte metas o rescatar antiguas actividades que disfrutes para que tu mente persiga nuevos logros. Ya sea deporte, baile, escritura, videojuegos o cualquier otro hobbie, este puede ayudarte a canalizar tus energías la próxima vez que comiences a sentir que lo extrañas.

3. Cuida de ti misma o de ti mismo

McGonigal aclara un punto importante: el estrés es una de las principales fuentes que gatillan adicciones, incluyendo el desenterrar a personas de tu pasado amoroso. Cuando nos sentimos abrumados, cansados o ansiosos, se gatilla una respuesta que los psicólogos describen como “alivio por contacto”, donde sólo queremos recuperar ese abrazo amoroso olvidándonos de todos los problemas que trae consigo.

De ahí que sea relevante tener el descanso y relajación suficientes para evitar estas reacciones de emergencia.

4. Cuidado con el oso blanco

Suena curioso, pero la forma más segura de que tu ex jamás abandone tu cabeza, es si haces esfuerzos por sacarlo. Los psicólogos llaman a esto el “efecto del oso blanco”: si tratas de no pensar en uno, aparecerá un oso blanco en tu mente.

Esto es válido no sólo en las relaciones amorosas, sino en las personas que están haciendo dieta y hacen esfuerzos por no pensar en el chocolate, o quienes intentan dejar de fumar evitando pensar en el cigarrillo. El resultado será peor. Incluso hay un estudio que proclama que mientras más intentes no pensar en tu ex, habrá más posibilidades de que sueñes con él o ella.

¿Qué hacer? No alarmarte. Asumir que pensar en tu ex es parte del proceso normal de dejarlo atrás y, sobre todo, que no es ningún tipo de señal.

5. Corta la comunicación y empaca sus cosas

En la guía de salud HealthGuidance, Elizabeth Danish recuerda un punto que muchas personas suelen pasar por alto, sobre todo en los primeros días tras un rompimiento: la necesidad de evitar el contacto.

Llamar por teléfono o mantener la comunicación por chat o mensajes de texto sólo servirá para remover las heridas. Incluso algunas personas pueden tener sexo con sus ex en un intento desesperado por recuperarlos o tras un momento de debilidad, revirtiendo todos sus progresos.

“Todo esto sólo reavivará las llamas, complicará las cosas y hará más difícil salir adelante. Cuando estés tratando de sanarte después de una relación, debes evitar totalmente el contacto y sólo restablecerlo si lo superaste definitivamente (y sólo si deseas hacerlo)”, explica Danish.

De la misma forma, deberías poner las cosas que te recuerden a tu ex dentro de una caja. Esto no sólo evitará que lo recuerdes innecesariamente, sino que la misma acción será una metáfora de lo que debes hacer con la relación antes de seguir adelante.

¿Es posible cambiar el pasado?

Ciertamente no, pero tal como explica el especialista en relaciones de pareja, John Alex Clark, sí podemos cambiar la forma en que miramos nuestro pasado. El punto de vista sobre la relación que dejamos atrás.

“Digamos que, por ejemplo, luego de 2 años conoces a alguien nuevo de quien te enamoras completamente. ¿Qué sucederá? Probablemente mirarás hacia atrás y estarás aliviado de que la relación con tu ex haya terminado, ya que era necesario para conocer a alguien mejor”, describe Clark.

“No es el pasado el que nos hace sentir tristes, en realidad es nuestra incapacidad para vislumbrar un futuro mejor y más brillante. Eso es lo que nos hace extrañar a un ex”, sentencia.