La Asociación de Industriales Pesqueros (Asipés) pidió seriedad en la discusión sobre la jibia, recurso cuya captura fue restringida por el Gobierno, impidiendo su pesca con arrastre y originando una serie de reacciones por el impacto que esto tendrá en el sector.

A la Asipés se le atribuye estar detrás de la movilización que protagonizaron trabajadores de empresas, sobre los cuales pesa una querella por interrumpir el tránsito en los tres puentes entre Concepción y San Pedro de la Paz.

Asimismo, ha recibido una serie de acusaciones por parte de pescadores artesanales y pymes pesqueras.

Luis Felipe Moncada, presidente de la asociación que agrupa a la industria pesquera, precisó que desde 2012 la captura de jibia se destina en su totalidad al consumo humano. Por lo tanto, la industria pesquera por ley no puede elaborar harina en base a jibia.

Según el dirigente de Asipés, de las 95 mil toneladas de jibia capturadas el año pasado a nivel nacional, el 84% se destinó a congelados, el 12,9% a fresco-refrigerados y el restante a conservas.

Debido a ello, refutó lo dicho por Pymepés respecto a que la industria pesquera buscaría adueñarse de la jibia, para destinarla a harina de pescado.

Moncada sostiene que la jibia es reconocida mundialmente como una plaga, y asimilarla a un recurso pesquero es carecer de información u ocultarla deliberadamente.

De igual forma, recordó el dirigente que según el Informe de la Subpesca de junio de este año, la presencia de la jibia fue calificada como “invasión”, y se relaciona con una fuerte reducción en la disponibilidad de la merluza común y merluza de cola.