El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, expresó su dolor y el de su país por el grave estado de salud del exportero internacional colombiano Miguel Calero, a quien el lunes le fue diagnosticada muerte cerebral en un hospital de la Ciudad de México.

“Nos duele mucho a todos los colombianos lo sucedido con Miguel Calero. Acompañamos de corazón a su familia”, escribió Santos la noche del lunes en su cuenta de la red social Twitter.

“El fútbol está de luto”, subrayó el mandatario.

El equipo mexicano Pachuca, en el que se retiró Calero el año pasado, informó en un comunicado que el guardameta “presenta muerte cerebral”.

Calero, de 41 años y campeón de la Copa América 2001 con Colombia, había sido hospitalizado de emergencia en la Ciudad de México el 25 de noviembre a causa de una embolia cerebral.

En un primer momento, los médicos informaron que la vida del exjugador estaba fuera de peligro pero su situación se agravó en las últimas horas.

Tras emitirse el comunicado del lunes, el jefe de Servicios Médicos del Pachuca, Antonio Torres, declaró que el diagnóstico de muerte cerebral es “irreversible” y reconoció que ya solo se está a la espera de que se consume el fallecimiento.

La situación de Calero causó tristeza y estupor en la afición colombiana, mientras su familia mantiene la fe en que logre recuperarse.

“Él está vivo, él no se va a morir”, declaró María Janeth Calero a la televisora Caracol en el municipio de Ginebra (departamento del Valle del Cauca, suroeste), donde nació su hermano Miguel.

Otro hermano del exfutbolista, Jhon Jairo Calero, dijo a la emisora Blu Radio que “Miguel lo es todo. Lo que él ha conseguido ha sido con esfuerzo y ese sacrificio la vida se lo tiene que representar”.

Calero, quien se formó en las divisiones inferiores del Deportivo Cali, alcanzó la fama en 1996 cuando ese club obtuvo su sexto título, y después fue traspasado al Atlético Nacional, convirtiéndose en la mayor transacción entre clubes del fútbol colombiano de la historia, con un pase de 1,3 millones de dólares.

Del Atlético Nacional se proyectó al fútbol mexicano, donde militó siempre en el Pachuca, con el que logró cuatro títulos nacionales y cinco internacionales.

Calero, que actualmente se desempeñaba como entrenador de porteros del Pachuca, es considerado uno de los futbolistas colombianos más destacados en el exterior y uno de los mejores arqueros que militó en el fútbol mexicano.