Una cumbre de grandes proporciones con lo más potente del rock nacional tendrá lugar en marzo en la capital. Una cita maratónica, a precios populares, que reúne a ocho importantes exponentes de diversa trayectoria, pero unidos todos por la pasión, dedicación y compromiso con su público que han exhibido a lo largo de todos estos años.

Encabezando el cartel está el regreso a Chile de Criminal, la banda más exitosa y consistente del metal chileno, presentando su más reciente disco “Akelarre” (2011), demostrando que la máquina de destrucción liderada por Anton Reissenegger, radicada hace años en Europa, funciona más aplastante que nunca.

También llega con novedades Dorso, el grupo más longevo y sui generis de la movida metalera criolla. “Recolecciones macabras del campo chileno” se llama el nuevo disco de los liderados por Rodrigo “Pera” Cuadra, un arranque demencial que fusiona el metal extremo con el espíritu místico del folclor de nuestra tierra, una atrocidad que sólo puede salir de la mente de estos maníacos.

BBS Paranoicos pondrá el lado más punk, viniendo de la celebración de sus 20 años que estuvo llena de hitos, como un show a tablero vuelto en el mismo Caupolicán y compartir escenario con los legendarios Bad Religion, entre otros. Yajaira está de vuelta también con su rock lisérgico y envolvente, a estas alturas un clásico de su género. Alejandro Silva llenará el escenario con su virtuosismo y su impronta que ya es sello de excelencia dentro del circuito. Y el rock patagón de Hielo Negro les mostrará a todos cómo se rockea desde el sur.

Tampoco faltarán las sedientas odas de Los Mox! a la buena vida del rock and roll, así como el hard rock imparable de los hijos predilectos de Lo Errázuriz, Devil Presley, que completarán la maratónica e intensa jornada.

La cita es el 4 de marzo en el Teatro Caupolicán desde las 16 horas, y las entradas están a la venta a través del sistema Ticketmaster desde los 7 mil hasta los 15 mil pesos.