La policía de Irlanda del Norte se enfrentaba a manifestantes la noche del viernes al sábado en un barrio de mayoría protestante de Belfast, al término de un desfile tradicional de protestantes por la ciudad, indicaron fuentes policiales.

Los manifestantes arrojaron proyectiles a la policía, que intentaba restaurar la calma en el este de la ciudad, indicó una portavoz policial, que invitó a la población a evitar el barrio hasta que volviera la tranquilidad.

La semana pasada, se registraron actos de violencia -”los peores en mucho tiempo”, según la policía- cerca del barrio de Short Strand, un enclave católico en una zona del este de Belfast antaño de mayoría protestante..

Estas violencias hicieron temer nuevos conflictos interconfesionales que causaron 3.500 muertos en unos 30 años en la provincia británica, antes de la firma de los acuerdos de paz en 1998.