Por segundo año consecutivo el servicio agrícola y ganadero -SAG- trabaja en el control de la avispa taladradora de la madera del pino en la provincia del Bío-Bío.

Entre las medidas tomadas para evitar su propagación, se encuentra el uso de control biológico en 42 parcelas ubicadas en diferentes comunas de la provincia a través de la introducción del nemátodo que destruye las larvas.

En ese sentido, Rodrigo Ther, encargado regional de protección agrícola y forestal del SAG, explicó que esta medida se realiza especialmente en esta época del año, con el fin de disminuir las poblaciones de este insecto, tan dañino para el rubro maderero.

El especialista explicó que la avispa taladradora tiene una importancia económica muy alta para el sector forestal en la zona, ya que afecta la producción de pino radiata.

Las parcelas intervenidas se encuentran distribuidas en las comunas de Santa Bárbara, Alto Biobío, Mulchén, Quilaco y Los Ángeles en pequeños y medianos rodales de pino.

Recordemos que en la provincia se han determinado dos áreas de cuarentena de esta plaga en las que se encuentra regulado el movimiento de madera, lo que implica que los propietarios deben cumplir con los protocolos establecidos para la corta y traslado de ésta.

Cabe destacar que dicha plaga es de origen europeo, y fue detectada por primera vez en Chile el año 2001, atacando particularmente a árboles debilitados, enfermos o muertos.