Si quieres evitar que el arroz te quede pegoteado, la recomendación de los expertos culinarios es lavarlo antes. Pero no es la única razón para hacerlo. Estudios científicos advierten que puede haber microplásticos, arsénico, plomo y otros contaminantes en el arroz crudo, que se reducen con el prelavado.
Cuando de arroz se trata, el mundo parece estar dividido en dos tipos de personas: los que lo lavan antes de cocinarlo y lo que no. Pero, ¿qué dicen los expertos?
De acuerdo a Science Alert, los expertos culinarios afirman que lavar el arroz disminuye la cantidad de almidón de los granos, producido por el proceso de molienda.
Por lo mismo, recomiendan lavarlo hasta que el agua salga clara cuando buscas que los granos no se peguen entre sí, pero para platos como risottos, paella o arroz con leche, donde se necesita que quede cremoso y pegajoso no lo recomiendan.
No obstante, la evidencia científica recomienda siempre lavar el arroz. ¿Por qué? A continuación te contamos.
Microplásticos, arsénico, plomo y otros contaminantes que se reduen al lavar el arroz
Según explican en Science Alert, el arroz tradicionalmente se lavaba para eliminar el polvo, los insectos, las piedrecitas y los trozos de cáscara que quedaban del proceso de descascarado.
Si bien en la actualidad los procesos industriales por los que pasa el arroz que compras en el supermercado son más rigurosos, aún puede ser recomendable pasarlo antes por un chorro de agua.
Un estudio publicado en la revista académica Journal of Hazardous Materials, señala que se han encontrado microplásticos en el arroz, debido al intensivo uso de plástico en la cadena de producción. En este sentido, se observó que el proceso de lavado enjuaga hasta el 20% de estas particulas.
El mismo sondeo señaló que independientemente del material del envase (sea bolsa de plástico o papel) contiene el mismo nivel de microplásticos.
Asimismo, el sondeo demostró que los plásticos en el arroz instantáneo precocido (instantáneo) son cuatro veces más altos que en el arroz crudo. Sin embargo, concluyeron que si enjuagas previamente el arroz instantáneo, se puede reducir el plástico en un 40%.
Por otro lado, según otra investigación, el arroz contiene niveles relativamente altos de arsénico porque el cultivo lo absorbe a medida que crece. El estudio mostró que lavar el arroz, puede eliminar hasta el 90% del arsénico bioaccesible. No obstante, también elimina una gran cantidad de otros nutrientes beneficiosos para el organismo como el hierro, el zinc y el vanadio.
Aún así, es mejor lavarlo, pues al ser muy pequeño el aporte del arroz en estos nutrientes, el impacto en la salud no es muy significativo.
Asimismo, otro sondeo analizó metales pesados como plomo y cadmio, y determinó que esta práctica reducía los niveles de estos entre un 7% y un 20%.
En conclusión, los estudios científicos al respecto recomiendan lavar el arroz antes de cocinarlo.
Refrigera tu arroz cuando se enfríe: lavarlo no protege de bacterias
Aunque lavar el arroz elimina considerablemente metales pesados, químicos y microplásticos que pudieran estar presentes, no lo hace con las bacterias.
La más común que crece en el arroz cocido dejado a temperatura ambiente es la Bacillus cereus, que puede causar enfermedades gastrointestinales que van desde malestares leves hasta cuadros muy graves.
Los síntomas -como náuseas, diarrea y vómitos- generalmente comienzan entre las 6 a 15 horas después de consumir el alimento contaminado.
El Servicio Nacional de Salud de Estados Unidos recomienda guardar el arroz en el refrigerador a una temperatura inferior a 5°C idealmente dentro de una hora desde que lo cocinaste. Tampoco es bueno que lo refrigeres cuando aún está caliente.
Si quieres acelerar el proceso de enfríamiento, puedes dividirlo en pequeños recipientes y dejarlo reposar al aire ambiente antes de meterlo a la nevera.
Además, indican que lo ideal es que lo consumas antes de 3 días de haberlo almacenado en el refrigerador.
Asimismo, cuando lo recalientes, asegúrate que el arroz alcance al menos una temperatura de 74°C o más. De este modo, no deberías tener problemas.
