Las carnes rojas son de las favoritas de los consumidores, en especial la carne de cerdo, por su delicioso sabor. Y además de ser muy ricas, también aportan nutrientes que nos ayudan a mantenernos saludables, como proteínas y hierro.

Para sacarles el máximo provecho, a la vez que mantenemos una dieta balanceada, hay que aprender a incluirlas en nuestras comidas. Aquí te entregamos algunos motivos de por qué hacerlo.

1- Los cortes con muy poca grasa

Las carnes extra magras son las que poseen muchas grasas. Una carne es extra magra cuando tiene una grasa total máxima de 5 gr/100gr, 2gr/100gr de grasa saturada y un máximo de 95 mg/100gr de colesterol y por porción de consumo, en todos los casos.

Esto significa que son saludables, llegando a convertirse en una de las carnes de consumo más compatibles con una alimentación equilibrada, aportando nutrientes que contribuyen a la óptima salud.

De acuerdo a un estudio realizado por el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Chile (INTA), se revelaron cinco cortes de carne de cerdo que son extra magros. Estos son el filete de cerdo, lomo centro, posta rosada, posta negra y cubitos de pulpa pierna, por lo que son una excelente alternativa para incorporar a las comidas de la familia.

Natalia Parraguez, nutricionista del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA), detalla que “lo ideal es cuidar las porciones de comida, de hecho, lo recomendable es que las mujeres consuman alrededor de 1.500 calorías al día y los hombres 2.000. Dentro de esto hay que tratar de incorporar siempre frutas, verduras, lácteos descremados y carnes extra magras, además de mantenerse hidratado durante todo el día”.

2- Menos sal y más especias

La sal es el condimento más usado para todos los alimentos en general, pero su consumo excesivo puede no ser saludable, ya que es un factor de riesgo para enfermedades como la hipertensión arterial y cardiopatías, detalla la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Algunos condimentos sin sodio que puedes utilizar para cocinar la carne son, por ejemplo, el ajo, albahaca, tomillo, orégano, nuez moscada, cebolla en polvo y pimienta, entre muchos otros. ¡Puedes crear diferentes mezclas para que cada plato tenga un sabor distinto!

3- Aporte de proteínas, vitaminas del complejo B y minerales

Los cortes extra magros de carne tienen varios beneficios para el organismo y considerando los resultados del estudio del INTA respecto a la carne de cerdo, se puede asegurar un adecuado aporte de proteínas, vitaminas del complejo B y algunos minerales. “Los alimentos con alto contenido de proteínas ayudan a mantener la masa muscular y el funcionamiento del organismo”, explica la nutricionista del INTA, Natalia Parraguez.

De acuerdo a lo detallado por la entidad, el aporte proteico de una porción de carne de cerdo alcanza a cubrir el 33% de la dosis diaria recomendada y, en el caso del fósforo, su aporte es cercano al 20% del requerimiento diario.

Junto a lo anterior, el complejo vitamínico B, que está presente en frutas, verduras, cereales y en las carnes, es relevante a la hora de hablar de nutrición. Este complejo vitamínico está a cargo del correcto funcionamiento del sistema nervioso e inmune. Además, tiene una gran importancia en el metabolismo de las grasas, carbohidratos y proteínas.

De las vitamina del complejo B, destaca la B12 que predomina en alimentos de origen animal que se encarga de la formación normal de glóbulos rojos y participa en el metabolismo de los aminoácidos que interfieren en el buen funcionamiento del sistema nervioso. Esta vitamina ayuda en la prevención de trastornos neurológicos y mejora la concentración.