Se encargan del cuidado de la salud de quienes acuden a un recinto hospitalario y durante sus jornadas de trabajo deben asistir a cientos de pacientes. Nos referimos a las enfermeras, quienes cumplen importantes labores para nuestra recuperación pero, para muchos otros son el icono erótico por definición.

La hipersexualización llegó a tal punto que los disfraces eróticos de la profesión se pueden encontrar en cualquier sex shop con una gran variedad de diseños.

Tras una petición del sindicado de enfermería SATSE, la distribuidora francesa Carrefour, al igual que El Corte Inglés y Alcampo en España, decidió retirar este tipo de disfraces de entre sus productos y lamentaron el malestar que hubiese podido ocasionar.

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El sindicato se dirigió a la cadena francesa cuando constató que ofertaba a sus clientes hasta diez disfraces de enfermera sexy (vestido ajustado, falda corta, zapatos de tacón y escote pronunciado)”.

SATSE lleva años promoviendo la iniciativa de sensibilización social Rompe con los estereotipos y ante la disposición de Carrefour, decidieron reconocer el apoyo de la cadena francesa en no seguir vendiendo disfraces que implican estereotipos denigrantes sobre las mujeres y las enfermeras.

Sin embargo, los trajes de enfermera no son lo único sexualizado, ya que en realidad ocurre con prácticamente casi cualquier posible disfraz femenino.

Es el caso de series que critican la cosificación de la mujer, como El cuento de la criada, el cual tiene su versión erótico del traje de la serie, más ajustado, más corto y escotado.

Lo más preocupante es cuando esta problemática llega a las niñas, con trajes de enfermera y bombera “sexy” destinada para menores de entre 4 y 6 años. Hace dos años la diputada española de En Comú Podem, Marta Sibina, denunció la venta de estos disfraces infantiles en el país.

Tras las constantes denuncias a la empresa Disfraces Alegría SL, quienes estaban tras la producción de los disfraces infantiles erotizados, la Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Andalucía (FACUA) pidió a la Fiscalía de Menores que investiguen el asunto, entendiendo que este hecho atentaba contra la dignidad de las profesionales y por estar dirigidos explícitamente a menores de edad.