En los últimos días se han registrado, con una inusitada frecuencia, caídas de ascensores en diversos edificios de nuestro país.

El domingo pasado, un joven quedó atrapado en un ascensor luego de que éste descendiera rápidamente por al menos cinco pisos en Las Condes. Tras ser rescatado por Bomberos, finalmente se descartaron lesiones.

Tres días más tarde, la caída de dos ascensores al interior de una galería ubicada en Agustinas con Paseo Ahumada, en Santiago, movilizó a personal de emergencias. Este accidente dejó un saldo de al menos cinco lesionados.

Hasta el diputado del Partido Radical por La Araucanía, Fernando Meza -y su esposa- se vieron afectados por un incidente de este tipo, luego que el elevador del edificio en el que se hospedaban en Valparaíso se desplomara repentinamente desde el piso 18 hasta el piso 10.

Ambos pasaron más de una hora encerrados y debieron ser rescatados por unidades de emergencia. Tras esto el matrimonio fue trasladado hasta un hospital de la comuna, en donde se les constataron fracturas y lesiones múltiples.

Sin duda una experiencia así resulta aterradora para todos quienes suelen utilizar este tipo de sistemas de transporte vertical en su día a día, razón por la que es inevitable hacerse la pregunta: ¿cómo resultar ileso a este tipo de caídas?.

Si bien no hay ninguna técnica que garantice sobrevivir, existen ciertas estrategias que podrían suavizar el impacto para así evitar lesiones de gravedad, o inclusive la muerte.

Frente a esta situación, normalmente muchos pensarían en saltar justo antes del impacto. Sin embargo, según señala un artículo del sitio INSH, esto no es una muy buena idea. Es más, la califican como “pésima”.

(CC) Wikimedia Commons
(CC) Wikimedia Commons

Aunque teóricamente saltar en el momento justo antes del golpe hará que disminuya la velocidad de tu caída, ofreciendo un suave aterrizaje, las posibilidades de lograrlo son sumamente bajas. En ese sentido, no disminuirás significativamente la velocidad a menos que saltes extremadamente rápido, sin contar la precisión casi exacta que necesitarás para saber cuándo saltar.

Además, lo más probable es que te golpees la cabeza contra el techo y aterrices peor, agravando tus heridas.

También hay quienes sugieren que debes pararte con tus rodillas dobladas para así absorber el impacto. No obstante, tampoco es recomendable.

Al momento del impacto, tu cuerpo parecerá mucho más pesado de lo que en verdad es. Esto, debido a que la gravedad hará que el ascensor acelere durante la caída. Y como te harás mucho más pesado, tus piernas no soportarán tu cuerpo. De hecho, incluso tu cabeza parecerá demasiado pesada para tu cuello como para aguantar, por lo que el riesgo de fractura ósea será alto.

Es por esto mismo que, de acuerdo al citado medio, lo mejor es recostarse boca arriba, asegurándose de cubrir la cabeza. De esta manera, distribuirás la fuerza del impacto en todo tu cuerpo.

insh.world
insh.world

Por su parte, el portal de temas científicos Live Science coincide con este último punto, agregando que esta posición además orienta “la columna vertebral y los huesos largos perpendiculares a la dirección del impacto, lo que los protegerá mejor del daño”.

Eso sí, aún cuando se trate del método más aconsejable, los expertos aclaran de que de igual manera habrá riesgos. “Siempre existe la posibilidad de que, sin importar qué tan bien amortigües el impacto, algo más te haga daño. Por ejemplo, la cabina del ascensor podría destruirse en el impacto, transformando el piso en una zona de empalamiento, laceración y escombros aplastantes”, enfatiza Live Science.

Ya que hemos hablado sobre las recomendaciones que se debe tener presente al momento de verse involucrado en una caída de un ascensor, también es importante precisar que este tipo de fallos son sumamente raros. Estadísticamente, los ascensores son bastante seguros, siempre y cuando sus mecanismos de seguridad funcionen correctamente. Del total de lesiones o muertes relacionados a estos mecanismos, la mayoría ocurren en las obras de construcción o mantenimiento.

Para tener una idea, desde el medio español Blasting News afirman que la probabilidad de sufrir un accidente en este medio de transporte es bajísima: 0.00000015%. Y que el ascensor se desprenda y caiga, es aún más improbable.

Michael Morse (CC) Flickr
Michael Morse (CC) Flickr

De acuerdo a Consumer Watch, los ascensores de Estados Unidos realizan 18 mil millones de viajes de pasajeros por año, los cuales provocan cerca de 27 muertes anuales, cifra que coincide con la tasa del 0.00000015%.

Los Angeles Times, en tanto, publicó un artículo en el que indican que los accidentes relacionados a los ascensores son tan escasos, que no hay muchos escritos sobre el tema en la literatura médica.

“Los llamados elevadores de cable requieren solo de un cable de acero tejido, pero por lo general tienen de cuatro a ocho cables ante cualquier eventualidad”, indica un estudio recogido por el medio nortamericano.

“Además, los ascensores están equipados con sistemas de frenado automático respaldados por frenos electromagnéticos”, agrega. Finalmente, el informe señala que “en la parte inferior del eje hay un sistema de amortiguadores de servicio pesado diseñado para salvar a los pasajeros, por si todo lo demás falla”.