En las próximas semanas, la Comisión Antidistorsiones debe decidir si le da la razón a Siderúrgica Huachipato y fija las medidas provisionales y antidumping, solicitadas por la empresa, para equilibrar la cancha frente a la competencia desleal del acero chino.

Las distorsiones de precios provocadas por el acero subsidiado por China, han significado para Huachipato pérdidas por casi US$1.000 millones desde 2009, lo que se ha acrecentado en los últimos años. Hoy, la empresa pierde casi US$1 millón por día, una situación insostenible en el tiempo.

Por lo tanto, de la decisión que tome la Comisión depende la subsistencia de una empresa estratégica para Chile.

La huella de Huachipato

Huachipato genera más de 20.000 empleos directos e indirectos; sostiene una cadena de valor de más de 1.000 pymes; es un proveedor clave de industrias críticas como la minería, la infraestructura y la construcción; además, de ser un catalizador de la inversión y del crecimiento del Biobío y del país.

Es también una empresa con una enorme huella social en Talcahuano y la región. Desde la formación de deportistas en el Club Deportivo Huachipato hasta la corporación cultural Artistas del Acero, su nombre y su historia están grabados en la comunidad. Con un compromiso genuino, ha impulsado el desarrollo de la zona con empleos de calidad, adquiriendo bienes y servicios a los proveedores locales y una colaboración permanente con la sociedad civil.

Huachipato es una empresa crítica para que Chile avance en su estrategia de descarbonización, a través de sus proyectos para la futura producción de acero verde.

Los trabajadores de Siderúrgica Huachipato, a quienes represento en el Directorio de la compañía, han ayudado a levantar con orgullo esta compañía insignia de Talcahuano y del Biobío.

El año pasado formé parte de la comitiva que acompañó al Presidente Gabriel Boric en su gira por Europa. Allí, el mandatario señaló enfáticamente que “no dejaremos caer Huachipato”.

Esperamos que esta compañía tan relevante para nuestra región y el país pueda seguir aportando al desarrollo sostenible de Chile. El momento de actuar es ahora.

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