El rango de mujeres que marcharon para el 8M está bastante alejado de las estimaciones de la autoridad y oscilaría entre el millón y el millón y medio de personas. De paso, el gobierno reincide en bajar las cifras de asistentes a este tipo de movilizaciones: “El gobierno mide mal las cosas que no le convienen”, cree.

Por Daniela Manuschevich, geógrafa.

Como suele suceder, mientras la versión oficial de Carabineros cifró en 150 mil personas a los asistentes a la multitudinaria marcha del 8M por la Alameda, los organizadores estimaron en cerca de 2 millones a estos participantes. Una cifra alternativa del gobierno, plantea un punto medio de 800 mil personas.

La permanente controversia que acompaña este cálculo de organizaciones sociales, medios y gobierno desde las marchas estudiantiles del 2001, ofrece respuestas con intereses para cada ámbito, pero siempre estimativas. Como profesional, docente de la Escuela de geografía de la UAHC y como una de las asistentes a la marcha del 8M, transité por distintos tramos de la manifestación entre las 11:00 y las 16:30 hrs, y dentro de la enorme masa humana aprecié distintas densidades personas por metro cuadrado.

Obviamente es imposible saber cuántas personas exactamente fueron al lugar, pero se puede hacer una aproximación de acuerdo a la densidad. Por ejemplo, cuando hay poca densidad, se calcula que sean 2 personas por metro cuadrado y cuando está muy poblado o al nivel de no poder caminar, estamos hablando de 7 a 8 personas por metro cuadrado. En función de eso, se hace una estimación y, según esos cálculos, que el número de personas que asistieron a la marcha este domingo debería estar entre 1 millón y 1 millón y medio de personas.

Siempre que se grafican estos procedimientos, existe una escala en la cual se trabaja. Lo importante en ese sentido, no es decir cuál es el número, sino que más bien entre cuánto y cuánto se estima la cifra de personas. Según lo anterior, uno toma el área y la multiplica por el promedio. Para mí ese promedio sería de 4 personas por metro cuadrado. Por otra parte, decir que habían 8 personas por metro cuadrado tampoco es correcto, ya que si fuera así nadie podría avanzar en toda esa área y sabemos que no fue así.

Por otro lado, el hábito demuestra que los asistentes a este tipo de manifestaciones tienden a desplazarse y no a permanecer en un lugar fijo, lo que es un factor importante de considerar al momento de hacer cualquier medición.

Siempre existen discrepancias entre la cifra de asistentes que entrega la autoridad y los propios organizadores de este tipo de encuentros ciudadanos. Lo que ha hecho este gobierno es bien particular y no solamente con este tema. Por ejemplo, el Censo se tuvo que repetir, el Censo agropecuario, aún no sale. La autoridad ha tenido problemas con los números en general. No sólo es un tema de Carabineros, sino que más bien tiene que ver con distintas mediciones a nivel oficial. Cambiaron la forma de medir la pobreza, cambiaron la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional, CASEN, etc. Es como si hubiera un problema con cuantificar cosas en general. Eso habla de un mal trabajo técnico, puesto que, si antes había una fórmula para hacerlo, ¿por qué cambiarla?

Trabajo en una investigación sobre bosques nativos, y he visto estas contradicciones también en este ámbito. Cuando se cambió la definición de lo que es un bosque nativo, lo que resultó fue que las extensiones de bosque nativo aumentaran bajo esta nueva forma de cualificarlo… entonces, es como si el problema para medir una menor pobreza fuera medirla de otra forma solamente. Es un comportamiento consistente de este gobierno el medir mal las cosas, en particular las que no le convienen.

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