Durante esta semana se ha levantado un amplio contingente debido a la crisis humanitaria y migratoria que afecta a la región de Tarapacá en nuestro país.

Tras esto, múltiples autoridades de la zona han demostrado su descontento ante la descoordinación con el Gobierno, como también de la ayuda tardía.

Así, tanto como autoridades nacionales, como autoridades bolivianas se han manifestado al respecto, y al igual que en Colchane, ellos también se sienten abandonados por las autoridades nacionales.

En conversaciones con el programa Podría Ser Otra Cosa, el alcalde mayor de la localidad fronteriza boliviana de Pisiga, Lindos Colque, se refirió ante la nula ayuda del Gobierno central de Bolivia.

“Esta semana ha bajado considerablemente, al menos un 60% no como antes”, dijo Colque.

El alcalde afirma que la localidad es como una estadía temporal para los extranjeros, ya que se quedarían un día para luego seguir su camino hacia la frontera de Chile, “su propósito es pasar a Chile. Se quedan solo horas”.

Así mismo, Colque indicó que las personas que llegan a la zona corresponden a familias completas, adultos, niños, e incluso personas en situación de discapacidad.

“Tenemos una acogida de las monjas, pero su capacidad es de 80 personas quienes llegan y se van”, agregó el edil.

Asimismo reveló que en Pisiga hay una población de 300 personas, mientras que los migrantes superarían los 100 a 200 por día.

“Lastimosamente el Gobierno no nos ha dado ninguna ayuda (…) estamos solos y no se han pronunciado”, recalcó Lindos Colque.

También aseguró que como comunidad han tenido que solidarizar con los migrantes a partir de fondos de la comuna boliviana. “No se puede controlar, los migrantes siempre buscan la manera, sea por arriba, sea por abajo donde sea”, agregó.

Escucha la entrevista realizada por Rafael Venegas