La tarde de ayer, el acusado de haber asesinado a un guardia municipal de Macul, quedó bajo la medida cautelar de internación provisoria. Paralelamente, la pareja de la víctima, relató cómo fue la última conversación antes de que Vega iniciara la jornada laboral que cambió la vida de una familia para siempre.
La pareja del guardia municipal de Macul, Hugo Vega (63), que murió tras haber sido apuñalado por un adolescente durante un procedimiento por Violencia Intrafamiliar (VIF), María Cristina Araneda, relató la última vez que habló con su futuro esposo antes del brutal y mortal ataque que recibió mientras trabajaba.
Según lo consignó Las Últimas Noticias, hace 10 años que Hugo trabajaba en la Municipalidad de Macul, cuya labor como inspector municipal le apasionaba. En ese mismo lugar conoció a su pareja, María Cristina Araneda, quien estaba encargada de recibir las llamadas telefónicas del Departamento de Seguridad de Macul, para derivar ayuda.
“Lo vi por última vez antes de su turno, y hablamos cosas de pareja, como la nueva fecha de nuestro matrimonio, porque la primera se suspendió por pandemia, y otras cosas cotidianas, como el concierto de Kiss a que íbamos a ir, ya que él amaba el rock”, dio a conocer la pareja de Hugo, quien alistaba los preparativos de su funeral.
Uno de los compañeros de la víctima, Carlos Miranda Ramos, destacó que: “Hablamos de un hombre que no sólo probó que era un buen inspector, también era un gran compañero”, y que acompañarán a Cristina en este difícil proceso.
El presidente de la Asociación de Funcionarios N.º 1 del municipio, Manuel Gallardo, indicó que esta muerte “no es una sorpresa”, ya que afirma que los guardias municipales no cuentan con atribuciones para portar implementos de seguridad.
“Los funcionarios deben comprarse sus implementos, como rodilleras, coderas, gas pimienta, y bastón retráctil, mientras están expuestos a agresiones con cuchillo y pistola”, aseguró.
En la misma línea, la secretaria general de la Confederación Nacional de Funcionarios Municipales, Lorena Menares, explicó que legalmente la seguridad de la ciudadanía está en manos de Carabineros de Chile; sin embargo, los alcaldes decidieron poner en marcha estos cargos ante a falta de seguridad en las calles.
“Su trabajo es más bien administrativo, y no en la primera línea de a violencia”, finalizó Menares.
Cabe destacar que este es el primer caso del que se tiene registro de la muerte de un inspector municipal en el país.
Finalmente, Hugo Vega dejó a dos hijos de su primer matrimonio, así como también a una hija que tenía con María Cristina, su actual pareja y compañera de trabajo.
