El gobernador de la región Metropolitana, Claudio Orrego, emplazó a las autoridades a no cerrarse y debatir la propuesta de implementar vagones exclusivos para mujeres en el Metro, ante el aumento en las denuncias de acoso. Asimismo, aclaró que no plantean una "segregación obligatoria", sino voluntaria para dar respuesta a las afectadas por este tipo de hechos.
Ante el anuncio de una campaña educativa contra el acoso en el transporte público, volvió a ponerse sobre la mesa la propuesta de implementar vagones exclusivos para mujeres en el Metro.
Al respecto, el gobernador de la región Metropolitana, Claudio Orrego, indicó en Expreso Bío Bío que en la reunión en la que participaron todos los actores, desde las policías, ministerios, dirigentas estudiantiles y representantes del Metro y del Transantiago, se abordó la propuesta de los vagones exclusivos para mujeres.
“Me parece que hay que estudiarlo. No se puede cerrar a priori a una cosa que las mismas dirigentas estudiantiles, la vocera de la Confech, está planteando porque se sienten inseguras”, explicó la autoridad regional.
Si bien afirmó que la solución a esta problemática requiere de un cambio cultural que podría tardar varios años, se preguntó qué medidas se pueden adoptar en el intermedio.
La autoridad confirmó que la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, se manifestó contraria a la idea, ya que -a su juicio- es normalizar el acoso.
Analizar evidencia
Sin embargo, Orrego refutó que hay muchas mujeres que se sienten inseguras en el Metro. Por eso, invitó a la empresa y a la ministra a que “lo evaluemos, que veamos la evidencia de lo que ha pasado en Japón, la India, en México y en Brasil”.
“Claramente hay que hacer una campaña de cambio de cultura, además hay una nueva ley de acoso que establece penas de cárcel y multas, pero la pregunta es qué hacemos mientras tanto (…) Se puede crear una alternativa voluntaria, porque no estamos planteando una segregación obligatoria”, agregó.
Por lo mismo, aseguró que no se trata de una medida que “atente contra la libertad y tampoco que sea algo que normalice el acoso, más bien lo visibiliza”.
Insistió que con la campaña contra el acoso en el transporte público no pretenden resolver el problema de fondo, pero buscan visibilizarlo y crear conciencia.
“Les pido a las autoridades que no nos cerremos a priori, discutamos, pongamos la evidencia. Si los problemas son más que las bondades, no lo hagamos, pero no cerremos el debate antes de”, reiteró respecto a los vagones exclusivos.
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