Tanto la Policía de Investigaciones como la Fiscalía Oriente se encuentran a la espera del informe forense del Servicio Médico Legal para esclarecer la causa de muerte de Tahía Cea, una joven de 20 años que se sometió a una abdominoplastía en la clínica estética Acuario.

Tras la muerte de esta joven al interior de Acuario, se han dado a conocer nuevos antecedentes sobre cómo funcionaba esta clínica estética.

Dentro de los problemas detectados se encuentran fallas en la ventilación de los pabellones, fichas incompletas de pacientes y tener solo un reanimador, elemento del que deben tener mínimo dos, razón por la cual la seremi de Salud prohibió su funcionamiento.

Sin embargo, durante esta jornada dieron a conocer más antecedentes contra esta clínica. En conversación con Mucho Gusto, Marilyn Olavarría -quien hizo su práctica por tres meses como arsenalera en Acuario- contó sobre presuntas irregularidades en su interior.

“No tiene un servicio de urgencias, si hay una complicación el paciente se tiene que derivar a otro lugar para ser atendido. Lo que le pasó a la niña que falleció, ella tuvo un paro cardiorespiratorio y no había cómo asistirla. Es como algo básico”, señaló Olavarría.

Además relató que después de pabellón, los pacientes van a recuperación donde les toman la presión y les dan medicamentos “pero no hay nada más avanzado en la clínica”.

A esto añadió que los pacientes son dados de alta a las pocas horas de haberse operado. “He averiguado que aunque sea una cirugía de una hora, igual no pueden darte el alta a las seis horas después. Sólo se quedaban hospitalizados los que eran abdominoplastía, los otros se iban para la casa”.

Sin embargo, Olavarría no sólo trabajó en el lugar, sino que también se sometió a dos operaciones en la clínica Acuario. Sin embargo, denunció que ambas terminaron mal.

“Cuando a mí me operaron, la anestesista no era anestesista. Era una técnico que asiste con la anestesia”, recordó.

En la primera se sometió a un aumento mamario, pero indicó que tras la cirugía quedó con suturas internas que “nunca se reabsorbieron. Hasta hoy las tengo”.

En tanto, en la segunda operación se realizó un implante de glúteos, el cual posteriormente se le infectó. “No he recibido ninguna llamada para saber si sobreviví a la cirugía, porque después llegué de urgencia a sacarme los implantes”, indicó.