El ministro de Agricultura, Antonio Walker, se reunió con el presidente de los remolacheros de Linares, en compañía de otros agricultores de la zona, para trabajar en las medidas que se tomarán ante el inminente cierre de la planta de Iansa en la comuna, que afectaría a 4.000 personas. En la ocasión Walker planteó la necesidad de una “agricultura moderna” en la zona.

La empresa azucarera anunció la paralización de la planta para fines de agosto y precisamente este sábado se recibió el camión con la última entrega de remolacha, en la planta de Linares.

El presidente de la Federación de Productores Remolacheros de Linares, Ricardo Escalona, sostuvo una reunión con el ministro de Agricultura, Antonio Walker, para definir las medidas que se tomarán en apoyo a los trabajadores del rubro.

Ricardo Escalona, aseguró que la cesantía afectará fuertemente a la región, tanto a trabajadores de la empresa como a transportistas y al comercio. Además afirmó que lo que ellos necesitan hoy es el respaldo económico, para iniciar la reconversión de sus terrenos.

El agricultor añadió que cinco años es el tiempo necesario para comenzar a percibir ganancias, luego del cambio de producción, y que ellos “nunca han pedido que les regalen algo”.

En tanto, Mario Meza, alcalde de la comuna de Linares, aseveró que la agricultura comenzará un nuevo proceso en la provincia y que para ello las autoridades deben trabajar en conjunto.

El ministro de Agricultura, Antonio Walker, explicó que la herramienta más importante que tiene la Provincia de Linares para salir adelante es una agricultura moderna.

El ministro aseguró además que ya conversaron sobre otras posibilidades de producción como, el trigo candial, el tomate y el maíz industrial.