La situación, corresponde a una problemática que se arrastra en la zona por cerca de una década.

Durante este primer semestre se podrá tener certeza cómo se tratarán las aguas contaminadas que salen desde la Mina Chiflón del Diablo a playa La Conchilla de Lota.

Desde la Corfo, indicaron que los estudios continúan y de ahí las demoras para establecer una medida de corto plazo ante un problema que se arrastra por cerca de una década.

En 2021 la Corporación de Fomento de la Producción inició estudios que permitan ver la factibilidad de instalar una planta elevadora que trate las aguas del yacimiento y que, recordemos, en 2018, el Centro de Ciencias Ambientales de la Universidad de Concepción (EULA), reveló que residuos evacuados desde el centro turístico El Chiflón del Diablo han provocado altos niveles de concentración de hierro en la bahía y playa de Lota.

Debido a esto, se espera que durante el primer semestre de 2024 se tengan los resultados de las indagaciones que realiza la Corfo dijo su directora regional, Roberta Lama.

A ello, se le suma lo que pudiera determinar el Servicio de Impacto Ambiental en la materia, por lo que se evalúan dos escenarios: la instalación de una planta que controle los desechos del recinto o conectarse a la red sanitaria.

Desde la administradora del citado monumento nacional, la directora ejecutiva de la Fundación Centro de Educación y Promoción de Acción Solidaria, Pamela Uriarte, dijo que están conscientes de que se trata de un problema de arrastre.

Por ello, se espera que durante este mes se desarrollen conversaciones con los vecinos del sector La Conchilla de Lota.

Cabe señalar que esta problemática ha generado afectación a pescadores y algueros, ya que no pueden recolectar alimentos para el comercio o consumo familiar.

A su vez, tampoco pueden tomar contacto con el agua para el uso de baño durante el verano, tal como ocurría previo al terremoto de 2010.