A su vez, el GORE Bío Bío le otorgó una prórroga a la cartera de Gobierno hasta el primer semestre del próximo año.

Se cumplió el plazo que tenía el Ministerio de Medio Ambiente para el recambio de 4 mil estufas a leña en la región del Bío Bío, y el Gobierno Regional accedió a darle una prórroga hasta el primer semestre del próximo año, pues no se ha llegado ni siquiera al 50% de la meta del programa que es financiado por el GORE a través de un convenio.

El gobernador del Bío Bío, Rodrigo Díaz, confirmó que el plazo que tenía Medio Ambiente ya expiró, y que se prorrogó un par de meses a petición de la cartera, pero seguramente tampoco logrará el objetivo en los tiempos previstos.

A mediados de este año, la Gobernación ya advertía que transcurridos dos años del programa para el cual el GORE destinó 4 mil millones de pesos, el avance en la ejecución era de apenas un 35%.

La autoridad, insistió en que tendrán que buscar el apoyo de otros organismos, debido a una ejecución que ha calificado de mediocre de parte de la cartera de Medio Ambiente, a la que responsabiliza del fracaso del recambio de estufas a leña por equipos menos contaminantes.

La mala calidad del aire en la zona llevó al Gobierno Regional a querer implementar incluso otro programa de recambio más masivo, que alcanzaba a un 80% de las estufas que había que retirar, pero el gobierno le advirtió que no tenía la capacidad de hacerlo, aunque estuviese financiado.

Respecto de la demora en la ejecución del programa original, la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, señaló que su cartera hizo un ajuste al programa de recambio a nivel nacional, debido a que los tiempos eran muy ajustados en relación a las metas de compra e instalación de las estufas.

Por esto, sostuvo la autoridad, se hicieron modificaciones en el diseño del programa, a partir de lo cual se compra un año y se instala el año siguiente, lo cual -afirmó- ha funcionado muy bien.

La secretaria de Estado indicó que el programa debiera funcionar mucho mejor con estas modificaciones y que el apoyo de los gobiernos regionales es crucial para mejorar la calidad del aire.

Finalmente, recalcó que el recambio de estufas a leña es una medida principal en las ciudades desde Rancagua a Coyhaique que cuentan con planes de descontaminación y donde la principal fuente del material particulado es la leña que se quema para calefaccionar los hogares.