Las víctimas de la contaminación en Quintero y Puchuncaví se hicieron parte en la acusación contra los ejecutivos de Enap imputados en el caso Crudo Iraní, confiando en obtener una condena en el próximo juicio oral. Los querellantes piden como sanción 5 años de cárcel efectiva por la responsabilidad en delitos ambientales.

A menos de un mes de la preparación del juicio contra los seis ejecutivos y empleados de la Empresa Nacional del Petróleo, se hicieron parte de la acusación del Ministerio Público en el caso Crudo Iraní las víctimas de una de las arista de la investigación.

Se trata de los mil 431 habitantes del cordón industrial de Quintero-Puchuncaví, querellantes en la causa, quienes representados por el abogado Remberto Valdés, reiteraron los cargos por delitos ambientales a partir del almacenamiento y procesamiento del petróleo importado por Enap desde Irán.

El caso Crudo Iraní investigó la trasvasije de parte del petróleo altamente tóxico en Talcahuano, donde en agosto de 2018 se produjo la primera emergencia ambiental, así como la segunda en Valparaíso, con cientos de personas atendidas en centros de salud de la zona a raíz de la contaminación generada.

Olga Garri, vocera de las víctimas de Quintero, recordó que las consecuencias del grave episodio vivido hace casi cuatro años aún persisten, esperando que la justicia sancione a los responsables, de manera que lo ocurrido no se repita.

La audiencia de preparación del juicio está fijada para el 7 de marzo en el Juzgado de Garantía de Talcahuano, tras lo cual el caso llegará al Tribunal Oral de Concepción, que debería fijar para abril o mayo el inicio del procedimiento contra los acusados.