La justicia mantuvo el arraigo y la firma mensual para el infante de marina imputado por el fatal atropello de Manuel Rebolledo, hecho ocurrido en octubre de 2019 en Talcahuano, en la región del Bío Bío.

El principal argumento para negar la prisión preventiva es que las actuales cautelares garantizan que el acusado no se fugará.

El miembro de la Armada, Leonardo Medina Caamaño, está formalizado por el delito de homicidio, cumpliendo cautelares menores que no fueron cambiadas por el Juzgado de Garantía de Talcahuano cuando se revisó la solicitud del Ministerio Público hace una semana.

Por eso es que el fiscal Julián Muñoz apeló y pidió a la Corte de Concepción la prisión preventiva, argumentando no sólo es un peligro para la sociedad, sino también subrayando en el aspecto doloso de su conducta.

A ese argumentó se sumó el abogado Marcelo Villena, en representación de los padres de Manuel Rebolledo, pero deslizando también a los ministros del tribunal de alzada el trato preferencial que se podría estar dando al imputado por homicidio.

Tras analizar todos los antecedentes, los ministros de la Sexta Sala de la Corte rechazaron el cambio de las cautelares, señalando que el arraigo y la firma mensual son suficiente para resguardar una posible fuga Leonardo Medina, y además justificando el magistrado Hadolff Ascencio, la libertad de un imputado por homicidio.

La defensa del uniformado destacó la resolución de la Corte de Apelaciones, pues Leonardo Medina esperará en esta condición la acusación que debería presentar en las próximas semanas el Ministerio Público y que obligará a un juicio oral por la muerte de Manuel Rebolledo Navarrete.