En lo que va de este año, la empresa Frontel ha presentado 11 querellas por igual número de robos de cables, de los que ha sido víctima en la región del Bío Bío.
De enero a la fecha se han sustraído más de 27 mil metros de cable de cobre en diferentes comunas de la región, siendo los sectores rurales los más afectados.
Con el propósito de perseguir penalmente a los responsables, la empresa presentó el viernes en el Juzgado de Letras y Garantía de Santa Juana una acción legal por el robo perpetrado la noche del miércoles en el sector de Tanahuillín.
En aquel robo se sustrajeron más de 3 mil metros de cable de cobre y fueron destruidos siete postes, viéndose afectados los sectores de Colico, Colico Bajo, Colico Alto, Palihue y Tanahuillín.
En el caso de la comuna de Santa Juana, este es el primer robo de este año, situación que preocupa, según señaló el gerente zonal de Frontel Bío Bío, Bernando Caire, quien aseguró que “los costos de este delito para las distribuidoras no son comparables con el gran daño que se le ocasiona a la comunidad”.
Esto porque el trabajo que se debe realizar para reparar las redes es de tal complejidad, que muchas veces los usuarios afectados deben permanecer sin energía por extensas jornadas, lo que conlleva graves problemas en la vida diaria de los vecinos.
Según lo informado por Radio Bío Bío, el delito es perpetrado muchas veces por bandas organizadas que se dedican a la reducción de cobre y que operan en zonas rurales, provocando interrupciones considerables en el servicio eléctrico.
Las más vulnerables son aquellas familias, que dada su lejanía con los centros urbanos, no cuentan con los medios para dar aviso oportuno a la empresa o a las policías.
El llamado de Frontel es a denunciar a los números de las policías, o bien, al número de atención a clientes de la empresa: 600 401 2021.
