Las comunidades mapuches de Bio Bío y Malleco analizaron acciones legales para impedir la construcción del “Proyecto Hidroeléctrico de Pasada Agua Viva” en el río Renaico.

El proyecto se ubica entre Mulchén y Collipulli y consiste en la construcción de una central de pasada de 31 megawatts y que aportaría al sistema interconectado central.

En septiembre de 2017, se recibió el permiso por parte del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). Tras la gestión, los vecinos, a través de la unión comunal, interpusieron un recurso de reclamación que fue rechazado en julio de este año.

La werkén del Lof Licancura Gisel Ñancul, señaló que existe molestia entre las comunidades que viven a orillas del río Renaico, porque se verán afectadas en el uso de sus aguas para el diario vivir y por dicha razón defenderán su “derecho ancestral”.

Además, criticó que nadie les haya pedido su opinión si estaban o no de acuerdo con este proyecto hidroeléctrico.

En esa misma línea, Eva López Huenchuleo, quien ha vivido siempre en el sector, expresó su tristeza ante la intervención en las aguas del Renaico porque aseguró que los “van a matar en vida”.

La abogada de la junta de vecinos de Collipulli y otras organizaciones sociales, Lidia Romero, señaló que van a estudiar la posibilidad de presentar un recurso de reclamación en contra de los ministros del SEA para revertir la determinación de autorizar ambientalmente el proyecto

Además, expuso que planean asesorar jurídicamente a las comunidades ante la posibilidad de que presenten otro tipo de recurso.

En la reunión, llevada a cabo en la ruca ubicada al interior de la escuela Miguel Huentelén, participaron también integrantes del Instituto Nacional de Derechos Humanos.