Pese a los esfuerzos de la familia por darle un tratamiento en Estados Unidos o Europa, Valentina Muñoz -niña de 6 años, oriunda de Los Ángeles- murió tras una luchar por poco casi la mitad de su vida contra el cáncer.

El largo camino comenzó cuando la pequeña tenía sólo 2 años 8 meses, ocasión en la que le detectaron la enfermedad por primera vez. Sin embargo, hubo recaídas e incluso se le descubrió un tumor en la cabeza y otro en la columna, con un diagnóstico de meduloblastoma.

El tratamiento consistía en radioterapia y quimioterapia. Junto a ello necesitaban un medicamento llamado Temodal. Sólo 5 tabletas tienen un costo cercano al millón de pesos.

Todas las patologías oncológicas infantiles están cubiertas por el AUGE, señaló en febrero pasado el médico tratante de la pequeña, José Miguel Díaz, pero el proceso no estaba exento de complicaciones.

“Las isapres entran en conflicto con los padres, empiezan a cuestionar los tratamientos o quieren hacerlos en lugares que ellos definen, como está estipulado. Los prestadores de este tipo de patologías están definidos por casa isapre”, explicó el facultativo.

El caso de Valentina se dio a conocer luego de que su familia iniciara campañas para recaudar dinero y seguir con el tratamiento que se realizó en Concepción. No obstante, la pequeña perdió la batalla y su padre informó esta mañana la lamentable noticia: la pequeña falleció la madrugada de hoy jueves, puesto que el cáncer se ramificó y no resistió la última recaída.

La deuda de la familia es millonaria y aseguran que ya perdieron la cuenta. Incluso, tenían un evento a beneficio organizado para el próximo 16 de agosto en el Teatro Marina del Sol, el que se realizará de todos modos.

En tanto, el velatorio se está realizando en la iglesia Adventista de calle Valdivia en Los Ángeles, mientras que este viernes se realizará el traslado a Concepción.