Un acercamiento con la dirección regional sostuvieron dirigentes del Sename a raíz de la movilización de trabajadores del centro de lactantes Arrullo, ante la precariedad en el funcionamiento del hogar por la falta de personal e infraestructura.
Más de cuatro horas estuvieron reunidos representantes de distintos gremios de funcionarios del Servicio Nacional de Menores con la directora regional del organismo, Rina Oñate, quien entregó soluciones a algunas de las demandas planteadas desde hace siete meses.
Ante la compleja situación, que amenazaba con agudizarse, la directora del Sename se vio en la obligación de recibir a los dirigentes, informándoles de la contratación de un pediatra, la llegada de la kinesióloga la próxima semana y el inicio de los trámites para la sala intermedia.
Gonzalo Carrasco, uno de los representantes de los trabajadores, criticó que se llegara a este nivel por el sólo objetivo de demandar mejoras para la atención de los menores.
La responsabilidad ante la nula respuesta a las demandas se atribuía a las autoridades locales del servicio, pero se reconoce que el principal problema está en la centralización de las decisiones, según subrayó la dirigenta Sandra Villanueva.
La falta de personal, de un médico, de un kinesiólogo y de la sala de separación para menores enfermos llevaron a que hace 10 días los trabajadores comenzaran una movilización que llevó al paro de actividades el lunes, medida que podría retomarse si no se cumple los compromisos alcanzados con la directora del Sename.
