Con el propósito de hacerle exámenes más exhaustivos, esta mañana se materializó por vía aérea el traslado al hospital institucional del carabinero que resultó gravemente herido tras una persecución, donde además murieron dos funcionarios en Calle Larga.
Al Hospital de Carabineros, emplazado en la comuna de Ñuñoa, fue trasladado el funcionario que resultó herido tras una persecución en Calle Larga, donde además murieron dos efectivos durante esta madrugada.
El operativo se originó cuando personal policial fiscalizó a un hombre que conducía en estado de ebriedad, quien huyó del lugar dando inicio a una persecución. Cuando los funcionarios intentaron bloquear el vehículo en que se desplazaba el sujeto y dos muejres, éste los impactó, causando la muerte de un suboficial y un sargento primero. Además, un tercer funcionario resultó herido de gravedad.
Carabinero presenta lesiones graves
Se trata del sargento Manuel Cáceres Saavedra, quien fue trasladado por vía aérea desde Los Andes al Hospital de Carabineros, Hoscar.
Al respecto, el delegado provincial de Los Andes, Cristian Aravena, informó que el funcionario policial presenta lesiones graves, una fractura en la clavícula, la costilla y diversas contusiones.
Mujeres heridas están fuera de riesgo vital
Sobre las otras dos personas heridas, detalló que se trata de dos mujeres, una de 27 y otra de 16 años, descartando que se trate de familiares del conductor que originó la persecución y que también perdió la vida en el procedimiento.
Según detalló, ambas están fuera de riesgo vital.
Aravena también explicó que el sujeto no portaba documentos, ya que tenía retirada su licencia de conducir por condenadas previas.
“Las tres personas que venían en la camioneta particular reportan domicilio en la comuna de Tiltil”, entregó el delegado como antecedente.
Es preciso indicar que los funcionarios que murieron corresponden al suboficial Alejandro Andrés Guerrero Guerrero (44), con al menos 24 años de servicio, casado y con dos hijos; y el sargento primero Raúl Eduardo Villegas Ortiz, con 23 años de servicio, casado y padre dos hijos. Tenía 49 años, ingresó a la institución en el 2000.
