La Corte de Apelaciones de Valparaíso y el ministro de fuero rechazaron la demanda civil que había sido presentada contra el presidente del Senado, Jaime Quintana, tras atropellar a un carabinero en 2015.

Los hechos ocurrieron en la comuna de Vilcún, región de La Araucanía, donde el uniformado murió tras ser arrollado. Por ello, la familia presentó la acción judicial -ese mismo año-, pidiendo una indemnización de 400 millones de pesos, según consignó La Tercera.

Según menciona el fallo, la demanda fue rechazada puesto que “no se ha logrado acreditar la culpa del demandado, se trata de un hecho que no pudo ser razonablemente previsto”.

“Se ha acreditado que el accidente se produjo a consecuencia de la omisión de las medidas de protección a que estaba obligada el servicio policial”, añade.

Lo anterior se debe a que el carabinero Jonathan Garrido Carril fue atropellado mientras realizaba un control policial a un camión en la Ruta S31.

Además, la resolución asegura que tampoco se pudo acreditar que Quintana estuviera conduciendo bajo los efectos del alcohol o en estado de ebriedad, debido a que la alcoholemia arrojó 0,00 G/L.

Asimismo, se establece que “no es posible concluir que el demandado haya infringido alguna de las reglas de tránsito invocadas”, asegurando que el senador conducía a una velocidad menor a la máxima permitida, y que la víctima vestía de color oscuro, sin prendas reflectantes y en un sitio sin alumbrado público.

“El servicio debe preocuparse de la seguridad de sus funcionarios, más todavía, como se ha dicho reiteradamente, considerando que era altamente probable un accidente de tránsito (…). Se trata entonces de un descuido del servicio que no puede ser imputado a un conductor normal”, sostiene el documento.

Ante el veredicto, el abogado defensor de Quintana, señaló que “se ha logrado establecer que la responsabilidad de ese accidente no fue del senador Jaime Quintana de ninguna manera”.

“El ministro Cancino establece con toda claridad que aquí Carabineros de Chile fue bastante poco diligente, yo diría que negligente, en el sentido de que no se le entregaron al cabo Garrido las mínimas protecciones para haber adoptado el procedimiento policial”, añadió.