Durante la jornada de este viernes, el Obispado de Valparaíso anunció el inicio de una investigación previa contra el presbítero Carlos Morales Grandón, por un presunto abuso sexual contra un menor ocurrido en 1986.

A través de un comunicado, el estamento indicó que a Morales se le impuso medidas cautelares, entre ellas, no poder efectuar “actos propios del ministerio sacerdotal y se le ordenó vivir en Valparaíso mientras dure la investigación”.

Siguiendo esa línea, la misiva indicó que el Obispado ha “solicitado al denunciante y ofrecido ayuda para ello, entregar los antecedentes al Ministerio Público acción que se comprometió a realizar el próximo lunes 20 de agosto del año en curso.

Asimismo, se precisó que al sacerdote se le inició en 2011 una investigación canónica por parte de la la Provincia Chilena de la Orden de la Merced.

Lo anterior, debido a que el “hecho que se le denunciaba había acontecido el año 1976 cuando el sacerdote era religioso mercedario”.

En 2012, al momento de decretar una sentencia, el Obispado de Valparaíso indicó que “si bien (los hechos) son graves, no configuran el delito sexual de menores”.

Finalmente, el estamento eclesiástico expresó que “nos unimos en oración para que renovemos nuestro compromiso cristiano de fortalecer comunidades sanas y seguras según nos enseña el Evangelio”.