El hacinamiento y el acceso limitado al sistema de salud son los principales problemas que identificó un estudio sobre la población migrante de Quillota.

En el 2016, de acuerdo a datos oficiales de Extranjería, se registraron 3.894 personas extranjeras viviendo en la provincia de Quillota, de las cuales el 53% se encontraban en la comuna del mismo nombre.

En el estudio de caracterización de la población extranjera en la comuna de Quillota se aplicó una encuesta a 356 personas.

Este reveló, entre las cifras que más llaman la atención, que el 40,7% de los encuestados son haitianos, el 38,7% venezolanos, el 10,9% colombianos y el 3,1% peruanos.

De acuerdo a este estudio, el 63% no está inscrito en el sistema de salud.

Luis Mella, alcalde de Quillota, explicó que bajo una orden alcaldicia se decretó que los migrantes puedan ser atendidos en los centros de salud primarios, tanto en los consultorios como en los recintos del Servicio de Atención Primaria de Urgencia (SAPU). Además aseguró que se está trabajando en otorgarles un certificado para que puedan ser atendidos en los hospitales.

Mella fue enfático en que por el momento la situación está controlada, sin embargo, la comuna no está en condiciones de recibir a una mayor cantidad de extranjeros.

Otro dato alarmante tiene relación con el hacinamiento, en donde el estudio especifica que todos los consultados comparten habitación con al menos una persona e incluso existen algunos casos en donde comparten una habitación entre 18 extranjeros.

Ante ese índice se refirió el diputado de la Democracia Cristiana, Daniel Verdessi, quien se mostró optimista ante la llegada de la población migrante tanto en la provincia como en todo el país, manifestando que es necesario recibirlos en buenas condiciones debido a que aportan, entre otras cosas, con trabajo y apoyo laboral.

El parlamentario se mostró preocupado frente a la situación de hacinamiento debido a que, según él, una de las consecuencias que conlleva este hecho es el del contagio de enfermedades virales.

La edad promedio de los encuestados es de 32 años y según el estudio es un dato relevante debido a que es una edad en donde las personas se encuentran activas en el ámbito laboral. El 61% de los extranjeros tiene permiso de trabajo, mientras que el 39% no cuenta con este.