El presidente del directorio de la Casa D’Italia, Renzo Arata, criticó al Consejo de Monumentos Nacionales señalando que no se respetó la normativa vigente, luego que el organismo anunciara el nombramiento de la propiedad -ubicada en la ciudad de Viña del Mar- como monumento histórico.

Arata, señaló que el propósito de vender el tradicional recinto fue un acuerdo de la mayoría de los socios de la Corporación.

“Estamos sorprendidos por la celeridad de esta declaración en la que no se ha respetado la Ley de Monumentos”, aseguró.

Al nombrar Monumento Histórico el inmueble, queda resguardado tal como lo solicitaron las autoridades regionales, e incluso con la intervención del propio embajador de Italia, quién mostró su preocupación ante una eventual demolición. Sin embargo -a juicio de Arata- la ley indica que para tomar una decisión como esta se debió consultar a los dueños, cosa que no ha ocurrido.


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El consejero regional y presidente de la Comisión de Patrimonio del CORE, Manuel Millones, quien fue gestor de la iniciativa de resguardo de la tradicional casa, tiene una opinión diferente ya que considera que para proteger una propiedad no se requiere de la aprobación de los propietarios.

También se refirió al tema el intendente regional Gabriel Aldoney, quien informó que la totalidad de los miembros del Consejo de Monumentos Nacionales votaron a favor de denominar la Casa de Italia monumento histórico.

El conflicto se genera cuando el directorio de la Casa de Italia -ante la imposibilidad de seguir manteniendo el inmueble- adoptó el acuerdo de vender la propiedad a la inmobiliaria “inmobilia”, la que está interesada en desarrollar un proyecto de departamentos y establecimientos comerciales en ese lugar.

Al ser definitivamente nombrado como Monumento Histórico, la transacción puede seguir su curso, pero no se podría intervenir ni menos demoler la casa.

El ofrecimiento efectuado por la empresa compradora es de 6 mil millones de pesos por el terreno y el inmueble, dineros que serán repartidos entre los 906 accionistas que tienen participación en la Corporación italiana.