La Fiscalía de la región de O’Higgins logró una condena de 10 años de presidio contra el líder de una banda dedicada al tráfico de drogas al interior de la cárcel de Rancagua, La Gonzalina.

El hombre que encabezaba la organización recibió colaboración de familiares, funcionarios de Gendarmería y un comerciante que trabajaba cerca del recinto penal, todos ya condenados en la causa que data de 2015.

La investigación, a cargo del fiscal Claudio Riobó, logró acreditar la activa participación y responsabilidad de Carlos Riquelme Ariz (36) en los ilícitos.

Riquelme se mantenía recluido en el recinto penal por otra causa, pero era quien coordinaba el negocio, encargando y comercializando las sustancias.

Los funcionarios de Gendarmería facilitaban el ingreso de las drogas al recinto penitenciario, el comerciante colaboraba con la compra de las sustancias y los familiares realizaban los depósitos bancarios.

El 19 de abril de 2016 se allanaron los domicilios de los imputados, donde se logró decomisar 483 gramos de pasta base de cocaína y marihuana. Además se incautaron tres vehículos que habrían sido adquiridos con las ganancias del negocio ilícito.

Riquelme fue sindicado como el líder de esta organización, quien además comercializar las drogas dentro del penal, recibía teléfonos celulares para facilitar las operaciones.

La semana pasada concluyó el juicio oral en su contra, donde fue condenado a 10 años y un día de presidio, además de una multa de 40 UTM como autor del delito consumado de tráfico ilícito de estupefacientes.