Un niño de 5 años de Chillán se transformó el viernes en una nueva prioridad nacional para trasplante hepático, debido a que una hepatitis fulminante lo mantiene con riesgo vital internado en una clínica en Santiago.
En menos de 15 días, el estado de salud del pequeño Matías Escobar Guzmán se ha deteriorado hasta tenerlo en su presente condición.
El menor fue llevado de urgencia el 12 de julio a un centro asistencial por mantener un color amarillento en la piel y tras los exámenes fue internado el fin de semana pasado en el Sanatorio Alemán de Concepción. El mismo día fue trasladado hasta el Hospital Clínico de la Universidad Católica en Santiago, donde el pronóstico es complejo, según lo reconoce Rodrigo Escobar, padre del niño.
El diagnóstico es una Hepatitis tipo A, cuya causa no pudo ser aclarada y que lo obliga a realizar un trasplante. Rodrigo Escobar, hizo un pedido de ayuda para encontrar un donante.
Incluso el mismo padre se ofreció para ser donante vivo, pero tras los exámenes se comprobó que no es compatible, por lo que la familia del niño espera que éste resista y un milagro le permita seguir viviendo.
