Una realidad que se arrastra por años en Osorno, región de Los Lagos, la cual acumula un sinnúmero de compromisos que buscan concretar la erradicación y dar una mejor vida a esta comunidad.

Según los últimos reportes sobre la realidad de campamentos en la provincia de Osorno, región de Los Lagos, son más de 1.345 las familias que viven en esta condición.

Una medida en muchos casos desesperada y de emergencia a la que se ven expuestos hombres, mujeres y niños, quienes por problemas económicos, las complicaciones del acceso a la vivienda y la falta de oportunidades, se ven obligados a vivir en asentamientos que no cuentan con servicios básicos de alcantarillado, energía y agua potable.

No es desconocido que la situación de las personas viviendo en campamentos es complicada, mientras que diversas autoridades han apuntado a un preocupante nivel de escasez habitacional en la provincia, y las consecuencias económicas que causó la pandemia.

Los últimos datos desde la cartera de Vivienda, revelan que en la provincia de Osorno actualmente hay 26 campamentos, de ellos 23 en la comuna de Osorno, dos en Puerto Octay y uno en Río Negro, lo que se traduce a un total de 1.345 familias.

En relación con ello, el presidente del macro campamento de Rahue Alto, Rubén Lican, explicó que la compleja situación actual lleva a que familias -basándose en la emergencia- deciden vivir en campamentos, una realidad que se debe erradicar debido a las precarias condiciones de algunos asentamientos.

Este campamento, que lleva cerca de 20 años en pie, finalmente tiene en implementación un proyecto de erradicación, sin embargo, es una realidad que no poseen otros sectores.

Durante el estallido social se formaron una gran cantidad de campamentos. Según el catastro de Techo Chile, desde 2019 aumentó en un 20%, y la cantidad de familias viviendo bajo esta situación incrementó en un 74%.

Ante ello, la dirigenta del campamento “Vamos por ese sueño” conformado en estallido social, Fernanda Burgos, comentó que en algunos lugares hay una complicada situación de acceso a servicios básicos, la que ha derivado en accidentes.

Sin embargo, como señaló la presidenta del campamento “Suyai”, Yaneth Carrillo, la comunidad intenta tomar todos los resguardos posibles para su seguridad, pero a pesar de ello, la situación de vivir en estos sitios puede ser un motivo de discriminación.

La encuesta aplicada en 2022 en la región de Los Lagos por Techo Chile a 315 hogares de campamentos, dio cuenta de que una gran cantidad accede al agua a través de la red pública sin medidor, mientras que un 24% lo hace por medio de camiones aljibes de la municipalidad y un 14% no cuenta con agua potable.

En cuanto a la electricidad, el 74% de los hogares acceden sin medidor público y colgados al servicio, sin seguridad en las instalaciones.

En relación, por ejemplo, a la situación laboral, la directora de Gestión Comunitaria Techo-Chile, Gabriela Quezada, explicó que un 92% en la región cuenta con un trabajo, sin embargo, más del 50% de ellas no posee contrato y cuenta con ingresos menores al salario mínimo, para familias con promedio de cuatro personas.

De acuerdo a ello, la delegada Presidencial de la provincia de Osorno, Claudia Pailalef, comentó que se establecieron convenios para apoyar la situación de emergencia de los campamentos, junto a ello, el proyecto actual en ejecución con el municipio, Serviu y Carabineros; entre otros, busca erradicar el macro campamento de Rahue Alto.

A lo anterior, sumó que a medida que aumente la capacidad de subsidios y avance el plan de emergencia habitacional, se podrán implementar nuevos proyectos a esta demanda tan urgente en la zona.

A ello, se ha sumado el trabajo del municipio a través de la Unidad de Campamentos, donde su encargada, Lorena Rodríguez, apuntó que ayuda al desarme de viviendas en el proceso de erradicación y apoya, con la entrega de agua, limpieza de fosas, materiales de construcción; entre otras, que en un principio se destinaban a solo dos campamentos.

El académico de la Licenciatura de Trabajo Social de la Universidad Santo Tomás, Daniel Silva, comentó que la situación tiene múltiples factores, como el aumento del valor del suelo y la incapacidad de ser beneficiados tanto por el sistema público como privado; entre otras.

Finalmente, comentó que la cantidad de familias que se forman por año se van acumulando con el paso del tiempo y el sistema se ve saturado, explotando con la formación de campamentos ante la falta de acceso a viviendas.