Debido a la determinación del máximo tribunal del país, el comunero alcanzó a estar sólo cuatro días en libertad en la región de La Araucanía.

De manera voluntaria. Así se presentó la tarde de este lunes ante el Centro de Estudio y Trabajo (CET) de Vilcún, región de La Araucanía, Celestino Córdova Tránsito, el único condenado por el asesinato del matrimonio Luchsinger-Mackay.

Esto último, luego que la Corte Suprema le revocara el beneficio de libertad condicional que le otorgara la Corte de Apelaciones de Temuco el pasado 30 de diciembre.

A su vez, dicha medida se hizo efectiva el pasado jueves 4 de enero, por lo que Córdova alcanzó a estar cuatro días en libertad.

Fue esta jornada que el máximo tribunal, a través de su Segunda Sala, conoció los antecedentes de una apelación presentada por el Gobierno y la propia familia Luchsinger.

Ante ello, Córdova deberá seguir cumpliendo su pena en el CET de Vilcún, recinto donde -de todas formas- mantiene los beneficios de salida trimestral y dominical.

En el fallo respectivo, se expuso que “se revoca la sentencia apelada de 30 de diciembre de 2023, dictada por la Corte de Apelaciones de Temuco, y en su lugar, se declara que se rechaza el recurso de amparo interpuesto a favor de Celestino Cerafín Córdova Tránsito“.

La entrega de la libertad condicional a Celestino Córdova -hace unos días- había generado diversas reacciones en el ámbito político y social.

Por un lado, algunos sectores expresaron su apoyo al comunero, considerando que su condena fue injusta y que su libertad era un gesto de diálogo y paz con el pueblo mapuche.

Por otro lado, sectores rechazaron con fuerza el beneficio, señalando que Córdova es un asesino que no merecía estar en la calle y que su libertad era una ofensa a las víctimas y un incentivo a la violencia en la región.