La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) entregó un nuevo reporte sobre la situación de los mineros atrapados en el pique Delia 2 de la mina Cerro Bayo en Chile Chico, quienes de acuerdo a la información entregada se mantienen sin contacto con el exterior, sumado a que se desconoce en qué condiciones se encuentran.
En lo que guarda relación con la llegada de la maquinaria de perforación de 300 metros -facilitada por la Minera Cerro Negro- al lugar, ésta se encuentra en desplazamiento, por lo que se espera su arribo aproximadamente a las 15:30 horas de este lunes a la mina. Esto luego de su llegada en barcaza a la localidad de Puerto Ingeniero Ibáñez, donde está programado un itinerario especial para el transporte de la maquinaria.
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Por su parte, Ariel Keim, dirigente sindical de la mina Cerro Bayo, -en conversación con El Trasnoche- no ocultó su preocupación sobre la situación, sosteniendo que “a esos de las 23:00 horas (del domingo) hubo nuevamente dos movimientos de tierra. Dos nuevos derrumbes que dificultan y ponen en riesgo la seguridad de los trabajadores que están desarrollando la labor de poder construir un dique”, esto con el objetivo de contener el agua y que alcanzaría unos 120 metros de altura.
Eso sí, Keim se mostró en contra del levantamiento de este muro, manifestando que “no podemos arriesgarnos a hacer un muro en un fondo que está inestable”, agregando que se le ha dicho a la empresa que -desde la perspectiva de los trabajadores- no es esa la solución, indicando que “nosotros estamos planteando que hay que desaguar la laguna. Hay una laguna que está a un nivel inferior, a no más de 200 metros, y hay que hacer un canal directo y depositar el agua de la laguna (verde) en la laguna que está al lado”.
Ariel Keim también profundizó en las probabilidades de encontrar en buenas condiciones a los mineros atrapados, expresando que “nosotros no perdemos la esperanza que nuestros compañeros estén con vida hasta que no haya algo que nos demuestre lo contrario”.
Volviendo a lo que son los trabajos de drenaje, a las bombas ya dispuestas por la empresa, se sumarán una bomba de mayor potencia de drenaje y otras dos que drenarán por las chimeneas, estas últimas facilitadas por la Minera Toqui, lo que permitirá drenar el vital elemento -por medio de una manguera- desde la Laguna Verde a la Laguna Salada, siendo esta a la que hacía referencia previamente el dirigente sindical Ariel Keim.
