Detectives de la PDI de Copiapó, Vallenar y Chañaral detuvieron la semana pasada a 41 personas tras una serie de acciones policiales que permitieron poner a disposición de la justicia a delincuentes por flagrancias y otros que tenían órdenes de detención pendiente por delitos como robo, lesiones, delitos económicos, entre otros.
El jueves recién pasado, la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de Copiapó detuvo a una mujer con cuatro requerimientos judiciales pendientes por delitos como hurto y amenazas. Por otra parte la Brigada de Robos (Biro) detuvo a un hombre que portaba un revólver bajo el asiento de su vehículo, además tenía en su poder siete cartuchos calibre 22 y más de $1 millón en dinero en efectivo.
Desde la policía civil indicaron que, los efectivos policiales se dedicaron a ubicar prófugos de la justicia a través de controles de identidad en sectores de mayor incidencia delictual. “El objetivo es sacar de circulación a estas personas que son requeridas por los tribunales de este país. Para eso se determinan zonas de mayor vulnerabilidad, las que se intervienen constantemente mediante acciones focalizadas”, señaló el jefe de las unidades operativas de la PDI de Atacama, prefecto Alfredo Silva Pavlov.
Oficina de Análisis Criminal
El prefecto Silva agregó que “estos servicios policiales se desarrollan en sectores previamente determinados y focalizados, información proveniente de la oficina de análisis criminal de la PDI regional, lo que permite realizar acciones policiales selectivas”, manifestó el prefecto.
“Continuaremos con nuestra misión principal que es investigar los delitos y paralelamente realizaremos estas acciones policiales focalizadas para capturar sujetos que se encuentran prófugos de la justicia a fin de colaborar con la disminución de la sensación de inseguridad en la comunidad”, sentenció el jefe policial.
