Reaparece ME-O para presentar denuncia ante fiscal nacional por Caso SQM

Este lunes, tras la elección presidencial del domingo, el ex candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami reapareció públicamente luego de varias semanas de silencio posteriores a la primera vuelta para declarar ante el Ministerio Público, en el marco de una denuncia administrativa que él mismo presentó por el denominado caso SQM.

La solicitud apunta a eventuales responsabilidades de la Fiscal Regional de Valparaíso, Claudia Perivancich; de la fiscal adjunta Paola Castiglione; y de quienes resulten responsables al interior del Ministerio Público.

ME-O aclaró que no acudió a denunciar un hecho nuevo, sino a entregar su testimonio en una acción que, según sostuvo, busca evitar que situaciones como la que él vivió vuelvan a repetirse en Chile.

El ex candidato aseguró que estuvo once años acusado de manera injusta, pese a haber terminado absuelto, y que durante ese periodo fue excluido del debate público y de la competencia política a través de filtraciones, acusaciones falsas y lo que calificó como un uso político de la justicia.

A su juicio, se trató de una investigación desproporcionada que terminó afectando gravemente su vida personal, familiar y su proyecto político.

Por lo mismo, explicó que esta denuncia no busca solo reparar su caso personal, sino también establecer responsabilidades y evitar que otros ciudadanos enfrenten procesos similares, financiados con recursos públicos.

Desde una mirada técnica, el exfiscal Andrés Cruz señaló que este tipo de investigaciones administrativas son posibles, pero complejas.

Explicó que las eventuales faltas disciplinarias están sujetas a plazos de prescripción, por lo que será clave determinar el momento en que habrían ocurrido las irregularidades.

Además, advirtió que el proceso judicial aún no está completamente cerrado, ya que resta la sentencia definitiva del tribunal, la cual incluso podría abrir la puerta a un eventual recurso de nulidad.

Cruz agregó que el escenario se vuelve aún más complejo, considerando que varios de los involucrados ya no forman parte del Ministerio Público y que acreditar una motivación política directa en la actuación de los fiscales resulta difícil.