"El presidente Boric, en una reunión con la Cámara de Comercio de Washington, dijo de manera clara que el proceso constitucional se acaba con el plebiscito próximo, cualquiera sea el resultado, que queda todo radicado en el Congreso, en la discusión de las leyes", aseguró el embajador Juan Gabriel Valdés.

El embajador de Chile en Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés, valoró la visita del presidente Gabriel Boric al país norteamericano, especialmente el encuentro que sostuvo con el mandatario de ese país, Joe Biden.

En ese sentido, el diplomático enfatizó en que hay una imagen positiva de Chile en el extranjero, y que la incertidumbre que genera el proceso constituyente se va a terminar luego del Plebiscito de diciembre próximo.

“El proceso constitucional introducía problemas de incertidumbre por cuanto efectivamente los empresarios no sabían si había un cambio, un bandazo hacia un lado, un bandazo hacia el otro”, señaló Valdés a La Tercera.

“La verdad es que lo que los empresarios que miran el asunto en detalle han llegado a la conclusión de que ninguno de los proyectos que se han planteado cambian la situación de la inversión extranjera”, enfatizó.

“Y el viernes el presidente Boric, en una reunión con la Cámara de Comercio de Washington, dijo de manera clara que el proceso constitucional se acaba con el plebiscito próximo, cualquiera sea el resultado, que queda todo radicado en el Congreso, en la discusión de las leyes”, sentenció el embajador.

De todas maneras, el representante diplomático en Washington, aclaró que el tema constitucional no fue parte de la conversación que sostuvo Boric con Biden, resaltando que “en ningún caso se alteró jamás el ambiente, el ambiente fue muy agradable permanentemente”.

No obstante, el tema que sí abordaron, fue la guerra en la Franja de Gaza, donde el mandatario reiteró la postura de nuestro país, que se vio refrendada con la llamada a consultas al embajador de Chile en Israel.

“En ningún caso hubo una discusión sobre eso, lo que hizo el presidente Boric fue plantear primero que en Chile no se tolera ni se va a tolerar nunca el antisemitismo”, apuntó Valdés.

“Lo segundo, que se condena de la manera más radical el terrorismo de Hamas y lo que significó la brutalidad que se cometió en contra de los israelitas por parte de un grupo de hombres armados de carácter terrorista”, agregó.

“Tercero, que efectivamente el derecho de Israel a defenderse es reconocido, pero tiene su límite, en el derecho internacional humanitario”, insistió.

“Cuarto que efectivamente lo que ha ocurrido en Gaza constituye una violación del derecho humanitario de manera evidente. Y, por último, que Chile apoya una tregua”, añadió.

“Por lo tanto, ese discurso yo pienso que en Estados Unidos tiene un completo respeto. Y la decisión de llamar o no llamar al embajador de Chile en Israel es una decisión soberana de la cual Estados Unidos no va a dar opinión porque es una decisión soberana del Gobierno de Chile, así me lo dijeron a mí formalmente en el departamento de Estado”, puntualizó.

“No creo que la posición del Gobierno de Chile sea anti Israel. Yo creo que la posición es de crítica al gobierno del primer ministro Netanyahu y ha sido durante mucho tiempo así. Pero no lo veo como anti Israel en ningún caso, ni tampoco como una posición que se tomó partido de una manera definitiva, más allá de la simpatía que tiene cada individuo”, profundizó Valdés.

Consultado por la petición del presidente Boric a Joe Biden para que Estados Unidos retire a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo, el embajador chileno le bajó el perfil, aludiendo a que se trata de un anhelo que planteó el expresidente Barack Obama.

“El tema de Cuba es un tema que aquí les duele, porque efectivamente el Presidente Boric dijo que la apertura a Cuba ‘fue una política del Presidente Obama’ y el Presidente Biden le dijo ‘sí, del Presidente Obama y del vicepresidente Biden’”, explicó.

“Por lo tanto, cuando el Presidente Boric llama a recuperar la política de Obama, es evidente que el Presidente Biden lo siente como una cuestión también propia y no lo ha podido hacer, es evidente, por razones internas”, enfatizó Valdés.

“Poner a Cuba en la lista de países terroristas en la cual están únicamente Corea del Norte, Irán y Siria, es absurdo, por cuanto Estados Unidos negocia todas las semanas con Cuba, tema de seguridad, por ejemplo, en materia de control de drogas o en la llegada de inmigrantes”, matizó.