El proceso de empadronamiento, que se inició el 31 de mayo pasado, se extenderá hasta el 31 de diciembre del 2023 debido a la alta convocatoria de personas inscritas.

El gobierno informó que cerca de 105 mil personas extranjeras que han ingresado de forma irregular a Chile fueron individualizadas y registradas a través del empadronamiento biométrico y que el 89% de ellas son venezolanos.

El ministro del Interior subrogante, Manuel Monsalve, dijo que solicitará a los gobiernos correspondientes el acceso a los antecedentes penales para sancionar a migrantes que hayan cometido delitos.

El 31 de mayo de 2023 fue cuando comenzó el proceso de inscripción y autodenuncia para aquellas personas extranjeras que ingresaron al país por pasos no habilitados y que no contaban con su documentación.

Frente a esto, autoridades realizaron un balance de este instrumento que forma parte de la Política Nacional de Migración y Extranjería, y reportaron que a la fecha, 105 mil personas que ingresaron irregularmente a Chile, han sido identificadas por el empadronamiento biométrico.

Es decir, más de 100 mil personas de las cuales no se tenía ningún tipo de información, mediante el registro biométrico, ahora se tienen datos personales, fotografía frontal del rostro y toma de huellas dactilares, que son registrados por detectives de la PDI.

El ministro del Interior subrogante, Manuel Monsalve, sostuvo que solicitará los antecedentes penales a los gobiernos correspondientes para, en caso de identificarse a una persona con antecedentes penales, esta sea sancionada.

“Esta base de datos que vamos a tener de huellas dactilares y de rostros la vamos a poder cruzar con la información que tiene el Ministerio Público”, comentó Monsalve. A esto agregó que “si hay una persona que se hubiese empadronada, vamos a poder saber si esa persona está vinculada a un delito que está investigando el Ministerio Público y eventualmente esa persona puede ser identificada, detenida, procesada y sancionada”.

Un 89,9% de los empadronados son personas de nacionalidad venezolana, un 3,5% colombianas, un 1,7% bolivianas y un 4,9% de otras nacionalidades.

Además, la mayoría de las personas inscritas residen en la Región Metropolitana, con un 58,9% del total. En segundo lugar, la Región de Valparaíso con un 8,5% y en tercer lugar, la Región de Bío Bío con 5,1% de los inscritos.

El director nacional del Servicio de Migraciones, Luis Thayer, señaló que este este proceso de identificación es un proceso complementario al fortalecimiento de las fronteras.

“Tenemos hoy día una situación que requiere mucho esfuerzo, que requiere avanzar todavía en mejor control de frontera, pero si lo miramos en perspectiva, en 2019 teníamos una crisis efectivamente, con decenas de miles de personas intentando ingresar a Chile”, dijo Luis Thayer.

En tanto, el prefecto Ernesto Leon, jefe de Migraciones y Policía Internacional de la PDI, indicó que el empadronamiento no constituye, en ningún caso, un proceso de regularización o una especie de “perdonazo”, y explicó que es exclusivamente un proceso de registro de identidad para fortalecer la seguridad pública.

“Es para comenzar el proceso en saber quiénes son los extranjeros que estaban habitando Chile, ya que en un momento determinado no teníamos ninguna identidad de ellos”, agregó el PDI.

El proceso de empadronamiento se extenderá hasta el 31 de diciembre del 2023 debido a la alta convocatoria de personas inscritas, que se concentran principalmente en la Región Metropolitana.