El Gobierno, a través de su vocera, tildó de "sumamente irresponsable" los fundamentos de los diputados que acordaron presentar una acusación constitucional en contra del ministro de Educación, Marco Antonio Ávila. En todo caso, la ministra legitimó el mecanismo y advirtió que en La Moneda no tienen "nada que esconder".

La ministra de la Secretaría General de Gobierno, Camila Vallejo, se refirió nuevamente a la acusación constitucional anunciada en contra del ministro de Educación, Marco Antonio Ávila.

Lo hizo en una actividad que encabezó precisamente junto a Ávila, en el marco de la entrega de equipamiento a 100 estudiantes del Servicio Local de Educación Pública Barrancas.

Consultada por el juicio político que se le avecina al titular del Mineduc, la portavoz de La Moneda partió señalando que parte del trabajo de él es también “responder las inquietudes y dudas de los parlamentarios”.

Sobre el mecanismo escogido por los congresistas para aclarar la polémica que se generó por una guía de “sexualidad afectiva” que incluía ejercicios para niños desde kínder, la ministra Vallejo aseguró que no le parecía el correcto.

“Usar como fundamento de una acusación constitucional un programa una orientación en términos de sexualidad y afectividad que no es de este gobierno, es sumamente irresponsable, por decirlo menos”, remarcó.

En la misma línea, la vocera del Gobierno añadió que “es legítimo que los parlamentarios quieran hacer uso de esas herramientas de fiscalización, pero la ciudadanía exige un mínimo de rigurosidad, profesionalismo (…) un mínimo de estándar para poder presentar estas acusaciones”.

La ministra recalcó que como Gobierno están no tienen “nada que esconder” y que siempre están “abiertos a conversar, siempre abiertos a responder”, tal como “lo hizo nuestra ministra del Interior en su momento cuando se le interpeló” y asegurando que para ellos instancias como estas “son grandes oportunidades de poder llegar a la ciudadanía con la información de lo que es el trabajo” que hacen.

En particular sobre el contenido de las guías cuestionado por parlamentarios, Vallejo indicó que se contextualizan en “debates en torno a los derechos de las diversidades en nuestro país que datan de hace mucho antes que esta administración”.

“No son una agenda impuesta por una autoridad u otra, sino que es una agenda que ha venido planteando la ciudadanía para hacer valer sus derechos, para que no se les discrimine, para que no sean sujetos de violencia, de crímenes de odio, Para que no sean víctimas de la homofobia o de distintos tipos de discriminación y violencia desde pequeñitos hasta grandes”, subrayó.

Ministro Ávila responde por acusación constitucional

Por su parte, el ministro Ávila indicó a la prensa que es necesario “evitar cualquier ruido asociado a esta situación”, agregando que él ha “estado siempre disponible para responder”.

“Mi responsabilidad como autoridad máxima de la cartera es que todos los niños, niñas y jóvenes, adultos también, porque tenemos educación de adultos, encuentren en los centros educativos espacios de acogida y de valoración de sus propias identidades”, sostuvo.

Esto último, aseguró el secretario de Estado, es algo que ellos siempre han promovido y que “históricamente está enmarcado en las declaraciones universales, tanto de los derechos del niño como de los Derechos Humanos, en los distintos tratados que hemos firmado, en la ley de inclusión, hoy día incluso también en el sistema de garantía”.

Por lo anterior, manifestó que “lo único que hemos hecho ha sido entregar orientaciones, las nuestras, a partir de ahora, el 17 de mayo, para que los establecimientos logren ir incorporando estas dimensiones asociadas a la inclusión”.

Por último, lamentó que se haya hecho un uso poco correcto de estas orientaciones que no son de nuestro gobierno y sobre eso es que se ha levantado toda esta polémica”.