Tras la decisión de la diputada socialista Maya Fernández de apoyar al candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, se produjo una división en el Partido Socialista, que podría afectar a Nuevo Pacto Social. Algunos militantes socialistas señalaron que hay que respetar los compromisos acordados por el bloque, mientras que otros afirmaron que es necesaria la libertad de acción.

Tensión se vive en el Partido Socialista, luego de que la diputada de la colectividad Maya Fernández decidiera apoyar en la primera vuelta al candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, y no a la abanderada de su bloque, Nuevo Pacto Social, Yasna Provoste.

A esto se sumaron además las fuertes críticas que realizó el histórico senador socialista, José Miguel Insulza, quien afirmó que aquellos miembros del bloque que decidan apoyar a otro candidato deberían congelar su militancia en sus respectivos partidos.

El diputado socialista, Gastón Saavedra, concordó con las palabras de Insulza señalando que lo mejor es que los descolgados congelen su militancia en el PS para que la coalición no sea perjudicada.

El también parlamentario socialista, Juan Luis Castro, afirmó que, si bien los denominados “descolgados” pueden tener una opinión legítima, están rompiendo un compromiso previo.

El diputado, Jaime Naranjo, señaló que en vez de iniciar una política de represión hacia aquellos militantes que apoyan a Boric, hay que analizar el por qué la candidatura de Yansa Provoste no ha logrado convencer al mundo socialista.

Un conflicto que podría comprometer al bloque del Nuevo Pacto Social, a pocas semanas de las elecciones presidenciales.