La situación en Iquique debido a la crisis migratoria ha llevado a que distintas autoridades se pronuncien al respecto. Entre ellos los candidatos presidenciales, quienes han coincidido en su crítica al Gobierno.

La crisis migratoria es un problema a nivel internacional, y Chile no es la excepción. Las postales del desalojo de la Plaza Brasil o la quema de carpas de migrantes – en su mayoría venezolanos- en Iquique, han sido algunas de las más crudas del enfrentamiento cruzado entre chilenos y migrantes del último tiempo.

Pero esta situación no es nueva en la zona, Colchane en febrero fue el epicentro de la llegada de decenas de migrantes que ingresaron por pasos fronterizos no habilitados, muchos de ellos incluso cruzando el desierto con niños en brazos.

Lo anterior terminó con la expulsión de 138 las personas que se encontraban varados en la zona, mientras que otros pudieron movilizarse a otras ciudades del país.

Frente a esta nueva ola migratoria, el aspirante a La Moneda de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, señaló que la dignidad de las personas debe estar en el centro de la política migratoria y de las medidas para afrontar la crisis. Además realizó una crítica al Ejecutivo.

Las declaraciones del Presidente Piñera en Cúcuta también recordó el candidato del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami, quien, a su vez, enfatizó en la poca comunicación que ha existido desde el Gobierno con las autoridades correspondientes de la zona.

En la misma línea se encuentra Yasna Provoste, candidata de Nuevo Pacto Social, quien también criticó el actuar del Gobierno y puntualizó que las expulsiones masivas no resuelven el problema si no existe un control claro en las fronteras.

El candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast, afirmó que a diferencia de la izquierda “nosotros condenamos la violencia siempre” tras lo ocurrido en Iquique. Además, afirmó que el desastre migratorio comenzó en con Gobierno de Bachelet y se salió de control con el de Piñera.

Emplazó a los candidato a ir a Iquique y “dar la cara ante los chilenos y los extranjeros”.

Es importante señalar que según cifras de extranjería, entre 2018 y julio de este año el gobierno ha intentado expulsar de Chile a 16.851 extranjeros por haber ingresado ilegalmente al suelo nacional. De ellos, solo logró materializar la expulsión de 1.401, siendo en su mayoría ciudadanos de Venezuela.

Desde el Gobierno, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, llamó a enfrentar el fenómeno migratorio en conjunto y evitar aprovechamientos de salud.