Producto de la pandemia y para cumplir protocolos de aforo, una gran parte de las sesiones de la Cámara de Diputados se lleva a cabo de manera híbrida, es decir, con parlamentarios en Sala y desde sus casas.

Esta situación ha traído más de alguna complicación a las figuras de la política chilena, ya sea por dejar abiertos sus micrófonos o porque sus cámaras dejan registro de situaciones inesperadas.

Esta vez fue el turno del diputado Miguel Crispi, de Revolución Democrática, quien preside la comisión de Salud de la Cámara. En plena sesión online de la mesa de trabajo, el congresista vivió un particular “chascarro”.

Cuando se disponía a entregar la palabra a la diputada Karol Cariola (PC), fue interrumpido por su hija, quien abrió la puerta de su oficina y posó frente a la cámara. “Amanda también quiere participar”, dijo el parlamentario entre risas.

Luego, se ve a una mujer que entra a la habitación y toma a la niña en brazos para sacarla, momento en que el parlamentario apaga su cámara. “Que salude Amanda”, señaló Cariola, quien se tomó con humor el impasse.

Este divertido hecho hizo recordar la interrupción que sufrió un académico en 2017, cuando era entrevistado por la BBC. Primero, apareció una niña de unos 3 años muy danzarina y el experto trató de alejarla con su mano, de una forma no muy disimulada.

Pero eso no fue todo, ya que luego entró un bebé en un andador y una mujer persiguiéndolo frenéticamente, quien luego se llevó a ambos niños.

Otros chascarros políticos

En marzo del año pasado, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe (UDI) fue captada desde su cama y tomando vino, mientras participaba de una sesión en que se aprobó un proyecto de ley para prorrogar las revisiones técnicas con motivo de la pandemia.

En la escena, se escucha a la parlamentaria abstenerse (la única abstención registrada en la votación), para luego acomodar sus frazadas, tomar su copa y apagar la cámara.

En junio fue el turno de Andrés Allamand (RN), senador en aquel entonces, quien dejó su micrófono prendido en plena comisión mixta que analizaba el proyecto de postnatal de emergencia.

En aquella oportunidad, el actual canciller interrumpió intempestivamente la intervención de su correligionario, Francisco Eguiguren. Mientras este último hablaba, se escucha a Allamand decir “Eguiguren que está hablando puras huevadas, sí, Eguiguren”, lo que es respondido por el funcionario del Congreso Nacional, Rodrigo Pineda, quien le manifiesta que “está con su micrófono abierto”.

“Estoy en una reunión de Defensa donde está Baradit, con esta otra vieja que nos cae mal”. Con esa frase irrumpió el diputado René Saffirio en medio de una comisión de la Cámara de Diputados sin percatarse que su micrófono estaba abierto, en mayo de 2020.

La frase iba aparentemente en contra de la periodista Mónica González, lo que desató la risa de la profesional y la incomodidad de los participantes en medio de la instancia.

No son pocos los chascarros que han ocurrido en el Congreso Nacional gracias a las sesiones telemáticas. De seguro, más de algún otro “blooper” ocurrirá en las discusiones del Poder Legislativo mientras dure la pandemia derivada del covid-19.