Durante la mañana de este miércoles, en el segundo día de su visita de Estado a Chile, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, tuvo diversas reuniones, entre ellas una con el expresidente de nuestro país, Ricardo Lagos, y otra en la Cepal, donde opinó sobre el proceso constituyente chileno.

La instancia junto a Lagos tuvo una duración de casi una hora, y hablaron sobre el futuro de América Latina y las relaciones de Chile con potencias económicas mundiales como Estados Unidos, China y Europa.

El expresidente Lagos, recalcó su buena relación con el mandatario del país vecino y recordó el rol importante que tuvo durante su mandato, pese a las dificultades que tuvo con el gobierno argentino en aquella época, por el conflicto del gas, donde Néstor Kirchner en 2004 ordenó disminuir las exportaciones de gas natural a Chile y cuando tuvo que adoptar ciertas políticas y medidas para enfrentar tal situación.

Durante la reunión, el ex mandatario Ricardo Lagos, señaló la importancia de las estrategias que deberá tener América Latina para mejorar su capacidad de interactuar con otros países y tenerlo como un desafío en los cambios constantes del mundo actual.

“Momento único e irrepetible”

Como parte de sus actividades, el mandatario argentino participó de una clase magistral en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

“Chile está viviendo un momento único en su historia. Único e irrepetible“, afirmó Fernández en dicha reunión refiriéndose al proceso constitucional.

“Chile está a punto de construir una nueva Constitución. Una Constitución no es una ley, una Constitución es el contrato que firma una sociedad para ver cómo quiere avanzar. Es el ponerse de acuerdo todos y decir vamos todos juntos para ese lado (…) y estos derechos, que son derechos de los ciudadanos, son derechos donde el Estado no puede intervenir”, sostuvo.

Agregó que “por ahí Chile no se enteró o no se dio cuenta, pero está a punto de dar a luz otro Chile, que seguramente tomará muchas cosas del Chile del presente, pero que cambiará también aquello que los chilenos entiendan que haga falta para hacer mejor sus vidas. Y esa oportunidad no hay que desaprovecharla, hay que aprovecharla muy bien”.

El presidente trasandino enfatizó en que este es un momento histórico “único en la vida de un pueblo. Pero además se trata de un pueblo al que yo amo profundamente, tengo un enorme amor por Chile (…) quiero que no exista más, se los digo de corazón, el dolor que vi en las calles de Chile en los últimos tiempos. Quiero un Chile que se una y puje por ese futuro”.

Adicionalmente participó en un almuerzo con empresarios chilenos, organizado por el Comité Empresarial Binacional, donde también participaron inversionistas. Durante la tarde de esta jornada, volverá a Buenos Aires.