La senadora Jacqueline van Rysselberghe espera que la investigación por el incendio de su sede en Concepción durante el estallido social no quede en la impunidad. Sobre la rebaja de la medida cautelar para el imputado, quien salió de prisión preventiva, la presidenta de la UDI espera que no se fugue y que enfrente el juicio donde se determinará su responsabilidad.

A menos de un mes que termine la investigación por el incendio de la sede de la UDI en Concepción, la senadora Jacqueline van Rysselberghe expresó su deseo que el caso termine con la individualización de los responsables y que éstos sean sancionados.

En enero fue formalizado como autor del siniestro ocurrido en noviembre pasado el joven Ignacio Caamaño Lara, contra quien el Juzgado de Garantía dictó la prisión preventiva, cautelar que fue luego modificada y reemplazada por el arresto domiciliario nocturno.

La resolución fue dictada tras analizar la solicitud de la Defensoría, sin la oposición del Ministerio Público, explicando el defensor penal Claudio Vigueras que se presentaron pruebas nuevas que acotarían la participación de su cliente en el hecho investigado.

Al respecto, la senadora y presidenta de la UDI sostuvo que lo único que queda esperar es que siendo aún sospechoso del incendio, el imputado no se fugue.

El próximo 22 de mayo se cumplen los cuatro meses de investigación, debiendo la Fiscalía decidir si lleva a juicio a Ignacio Caamaño, y por qué delito, al igual que respecto de Pamela Gutiérrez, formalizada por desórdenes y daños en la misma causa, y a quien el Ministerio Público responsabiliza por abrir la puerta de la sede parlamentaria de la senadora y su hermano el diputado Enrique van Rysselberghe, permitiendo que desconocidos ingresaran y generaran destrozos.