Luego de que la Intendencia de la región de O’Higgins no autorizara la Cumbre del Rock de Rancagua que iba a efectuarse este sábado y domingo, y tras múltiples dificultades, los organizadores confirmaron que la serie de eventos bajo este proyecto han llegado a su fin.

Así lo confirmaron en un comunicado, en que asumieron la responsabilidad por el fracaso de la iniciativa.

Cristián y Juan Andrés Ossandón fundamentaron el anuncio en una serie de problemas económicos sufridos, y a decisiones de producción que no tuvieron los resultados esperados.

Asimismo, expresaron sus esperanzas de que alguien más a futuro tome el concepto y lo lleve hasta el siguiente nivel.

Comunicado de la organización

“Estimados amigos, les tenemos que comunicar algo terrible para nosotros, y para muchos. La cancelación definitiva de La Cumbre 2019”.

“De este modo, este proyecto que ha intentado impulsar, defender y crear valor alrededor de la música chilena por más de doce años, llega a su fin. Sucumbimos frente a los eventos gratuitos, que fueron socavando las bases de nuestra propuesta (justamente lo inverso, cultivar valor, y estrechar la brecha de percepción entre artistas nacionales y extranjeros)”.

“Este año ha sido tremendamente adverso para nosotros, y trabajamos incansablemente para darlo vuelta. Encontramos aliados entusiastas en la Municipalidad de Rancagua y en el Consejo Regional de la VI Región. Nos dieron un apoyo económico (no todo el que necesitábamos, pero muy valioso y se agradece), y nos acompañaron a buscar recursos en la región también, que luego de mucho esfuerzo no pudimos conseguir. Lamentablemente, se nos ‘cayó’ un aporte muy importante en esta última semana, que terminó por sepultar nuestras esperanzas”.

“Lo dimos todo, pusimos el corazón entero, todos nuestros recursos humanos y económicos para que esto funcionara. Llegamos hasta el final: El montaje estaba terminado, los artistas probaron sonido, pero… a punto de llegar a la meta, no lo logramos. Y lo perdimos todo”.

“Queremos pedirles perdón a nuestros fans, a nuestros queridos y admirados músicos, a todo nuestro equipo incondicional y talentoso que nos ha acompañado por años; a nuestros auspiciadores, patrocinadores, a los medios de comunicación que nos acompañaron siempre, a todos los que creyeron en este sueño que hoy se rompe, y esta mirada de mundo que hoy tiene que asumir su fracaso”.

“La Cumbre del Rock Chileno ha dado muchas alegrías a centenares de músicos nacionales, y a muchos miles de personas que han sido testigos de trozos de historia memorables de nuestra música. Y a pesar de que para nosotros ha tenido -y seguirá teniendo- costos altísimos en lo personal, en lo económico y en lo familiar, es un viaje que ha valido la pena”.

“La Cumbre no tiene la culpa. Es un proyecto sin fines de lucro, que busca un fin noble y digno. Seguro alguien más en el futuro abrazará esta iniciativa, y la llevará al siguiente nivel, donde nosotros no supimos llegar”.

“Asumimos toda la responsabilidad, y seguramente vendrán tiempos muy difíciles para nosotros como gestores y como impulsores de este proyecto”.