Prácticamente acorralado quedó el obispo evangélico Eduardo Durán Castro, luego de que su hijo, el diputado RN Eduardo Durán Salinas, renunciara a la junta de oficiales de la Catedral Evangélica de Santiago, quitándole uno de los principales soportes para la continuidad en el cargo.

Durán Salinas confirmó su salida durante esta madrugada, citando diferencias irreconciliables con su padre, quien se ha vuelto involucrado en una serie de polémicas respecto de su patrimonio y, más recientemente, el anuncio de separarse de su mujer -la madre del parlamentario- para volver a casarse.

Este último antecedente habría sido clave en su distanciamiento, gatillando una fuerte discusión entre ambos luego de que Raquel Salinas le exigiera al obispo Durán renunciar al cargo si quería divorciarse de ella.

Con la salida del diputado Durán, quien recibía una “mesada” de 4 millones de pesos en palabras de su propio padre, la continuidad de Duran Castro a la cabeza de la Primera Iglesia Metodista Pentecostal, se ve cada vez más comprometida.

Convocan protestas a las 17 horas

La renuncia de Durán Salinas se suma a la presión de las propias iglesias, considerando que hay una protesta convocada para este sábado a las 17 horas en el frontis de la Catedral Evangélica, a fin de exigir la salida del obispo.

A esa hora está agendada la sesión de estudio bíblico que debe ser dirigida por el propio obispo Durán, momento en que -según fuentes de Bío Bío- podría anunciar su renuncia.

Los apoyos de Durán Castro se han visto fuertemente mermados en los últimos días. Cerca de 70 iglesias ya le han quitado su respaldo, manteniendo solamente el apoyo de 5 congregaciones.

En caso de no apartarse voluntariamente, la junta de oficiales requiere una mayoría de sólo 2/3 para pedir la renuncia o iniciar un proceso de destitución de Durán Castro.