El Cuarto Tribunal Oral en Lo Penal de Santiago condenó a cuatro años de libertad vigilada al exejecutivo de las sociedades controladoras de SQM, Aldo Motta Camp, tras un juicio que se extendió por más de siete meses.

En el juicio, se acreditó dos delitos de manipulación bursátil y uno de abuso de mercado por parte de Motta, en donde se realizaron operaciones de carácter ficticio que perjudicaron de este modo a los accionistas minoritarios y además instrumentalizaron el mercado, según la acusación del Ministerio Público.

EL exejecutivo fue encontrado culpable en octubre pasado por estos delitos, pero sólo este domingo se conoció la pena que deberá cumplir.

Además de los cuatro años de libertad vigilada, el exejecutivo de las empresas Cascadas fue sancionado con la prohibición de ejercer cargos de gerencia en empresas que transan en el mercado de valores por cinco años.

El denominado caso Cascadas investigaba como gracias a operaciones bursátiles ficticias el empresario, Julio Ponce Lerou, logró aumentar el valor de sus empresas, situación que habría causado pérdidas en el mercado por cerca de 600 millones de dólares.